Nos ha llegado a consola día uno a Xbox Game Pass la versión preliminar de The Wandering Village. Se trata de un título de construcción desarrollado y publicado por Stray Fawn Studio con un toque bastante original que lo diferencia de otros juegos de gestión.
Como decimos, se trata de una versión preliminar del juego, por lo que aún no está acabado. Es un trabajo en curso que, a pesar de que es bastante sólido y disfrutable de principio a fin, es posible que vaya cambiando con el tiempo o que incluso no se acabe lanzando como producto final. Todo parece indicar que sí lo hará, porque es un título muy completo, con una jugabilidad pulida y con un gusto exquisito en lo artístico.
La vida a lomos de un gigante
El mundo post apocalíptico de The Wandering Village ha sido invadido por unas plantas tóxicas que se han ido extendiendo por toda la superficie hasta el punto de hacer casi imposible la vida en el suelo. Nosotros pertenecemos a un grupo de supervivientes que han encontrado un refugio seguro a lomos de una colosal criatura a la que han llamado Onbu. El jugador asumirá el papel del líder de los supervivientes, que tendrá que construir un asentamiento seguro y próspero para vivir a la vez que entabla una relación simbiótica con la criatura que nos da cobijo.
Sobrevive en The Wandering Village
Para asegurar nuestra supervivencia, es imprescindible establecer una aldea funcional capaz de atender todas las necesidades de sus habitantes y de Onbu. Los residentes deben tener acceso a una alimentación variada y adecuada, una vivienda digna, la capacidad de contrarrestar las toxinas de las esporas y, por supuesto, empleo para mantener el funcionamiento de la comunidad.
La obtención de recursos es crucial para la construcción, como la madera y la piedra, que podemos recolectar manualmente o mediante aserraderos y canteras. Además, es importante proporcionar viviendas adecuadas, con varias opciones disponibles, cada una con sus beneficios pero con costos de construcción variables. A medida que vayamos aumentando la población de nuestra tribu deberemos construir más casas para dar cobijo a todos los habitantes.
¡Todo el mundo a trabajar!
La diversificación de empleos es fundamental para el funcionamiento eficiente de la aldea. Desde la producción de tablones de madera y losas de piedra hasta la fundición de hierro y cristal, pasando por la distribución de alimentos y la limpieza de áreas contaminadas, cada tarea es esencial.
Por ejemplo, para garantizar que los aldeanos no pasen hambre, tenemos que crear granjas para cultivar diversos tipos de plantas. A su vez, debemos asegurarnos de tener suficiente agua, ya sea recolectándola de la humedad del aire o cultivando cactus. Mantener altos niveles de felicidad en la comunidad atraerá a nuevos miembros que deseen unirse a nuestra aldea y contribuir a su prosperidad, aportando nueva mano de obra.
El avance tecnológico, a través de investigadores, es clave para desbloquear nuevas herramientas y comodidades, desde elementos cotidianos como una cocina hasta descubrimientos más sorprendentes. No obstante, debemos ser cautelosos con las tecnologías que implementamos, ya que pueden tener consecuencias inesperadas a largo plazo. En especial, debemos evitar el uso de tecnologías que puedan tener efectos negativos en Onbu, ya que podría generar problemas futuros.
La convivencia con Onbu es fundamental
La amenaza de las esporas tóxicas está siempre presente pero gracias a que viajamos a lomos de Onbu no serán tan letales. Lo que sí es que requiere atención constante, ya que los aldeanos pueden enfermarse y perderemos valiosa mano de obra. La solución es cultivar hierbas curativas para su uso en las enfermerías por parte de los médicos. Además, respecto a este punto y muchos otros, será importantísimo tener una buena relación con la criatura que nos acoge para lograr vivir lo mejor posible.
Este es el elemento diferenciador que destaca por encima de todo y distingue a The Wandering Village de otros simuladores de su género. La propia relación con Onbu tiene efectos en la jugabilidad del juego, la cual nos presenta nuevos escenarios y situaciones constantemente a los que tendremos que adaptarnos lo mejor posible. Es la primera vez que el jugador tiene poder en lo que se refiere a su relación con el entorno y este punto resulta muy interesante.
Es fascinante cómo tenemos la opción de coexistir en armonía con Onbu o tomar un camino más parasitario, mientras nos preocupamos por el bienestar de nuestra aldea y aseguramos la supervivencia de Onbu. En ambos casos, es imprescindible brindarle un nivel mínimo de cuidados, alimentándolo y administrándole antídotos periódicamente para reducir sus toxinas. Nuestro éxito en el juego dependerá de mantener a Onbu con vida ya que si muere se acabará la partida.
Si optamos por una simbiosis, obtendremos enormes ventajas, ya que Onbu obedecerá la mayoría de nuestras órdenes, permitiéndonos llegar a donde deseamos y movernos con mayor rapidez y eficiencia.
Viajando continuamente
La cámara del juego tiene varios niveles de zoom para ofrecer varias vistas estratégicas. Al desviar nuestra atención de Onbu obtenemos una visión más amplia, revelándose ante nosotros un mundo vasto que espera ser explorado. Podemos y debemos enviar valientes exploradores a las minas, bosques, asentamientos y áreas contaminadas para obtener recursos útiles para nuestra supervivencia. Además, tendremos una visión general de los caminos que nuestra aldea recorrerá a lomos de la criatura gigante. Si hemos establecido una buena relación con Onbu, tendremos la ventaja de elegir las direcciones en los cruces, tomando los caminos más beneficiosos para nosotros.
A medida que nos movemos, nos adentraremos en diversos biomas, como la exuberante selva, el ardiente desierto o las zonas contaminadas. Cada bioma tiene sus peculiaridades. En el desierto, la falta de humedad nos impedirá recolectar agua del aire, pero podremos obtenerla de los cactus que cultivemos. También, el calor afectará el crecimiento de algunas plantas y hasta la salud de Onbu, quien puede quemarse las patas en la arena caliente. En estos casos, si tenemos una relación cercana con él, podremos ordenarle que corra más rápido para evitar daños.
Durante nuestro periplo, nos encontraremos con nubes de esporas y es probable que interactuemos con otros supervivientes e incluso con otros Onbus que también pululan por estos territorios desconocidos. La experiencia de explorar estos entornos nos ofrecerá un sinfín de oportunidades y desafíos.
No todo es perfecto
No es oro todo lo que reluce en The Wandering Village. Al tratarse de una versión preliminar aún le quedan muchos elementos que pulir. Existe una necesidad evidente de mejoras en los sistemas de asignación, automatización y priorización de tareas, elementos indispensables para este tipo de juegos. En la versión actual, hay ciertos elementos poco eficientes y que resultan confusos en la interfaz.
Otro aspecto que merece una revisión son los avisos y notificaciones relacionados con los eventos que ocurren en la aldea. Actualmente, las acciones tanto de los aldeanos como de Onbu apenas se registran en un pequeño chat situado en la parte inferior izquierda de la pantalla. Esto puede ser problemático cuando ocurren situaciones críticas, como una hambruna y la muerte progresiva de los aldeanos. El juego no nos proporciona una advertencia clara y llamativa de que el contador de población está disminuyendo, lo que puede llevarnos a encontrarnos repentinamente con una población diezmada y la consecuente derrota en el juego. En un título con una interfaz tan densa como este, es esencial recibir este tipo de información de manera visible y destacada, lo cual, hasta el momento, no se ha logrado plenamente. Además, a pesar de que el manejo con el mando es bastante bueno, hay acciones que resultan poco intuitivas de realizar todavía. Por ejemplo, cuesta manejarse por ciertos menús como los de la barra superior y eso entorpece la experiencia. Esperemos que los desarrolladores tomen nota pronto y puedan subsanar estos inconvenientes.
The Wandering Village es indiscutiblemente precioso
Si algo tiene The Wandering Village es que es precioso y entra por los ojos. El arte de los escenarios parece estar hecho a mano y gracias a los diferentes niveles de cámara podremos apreciar desde el plano más general del mapa hasta un plano detalle muy cercano de nuestra aldea. Todo está recreado con un gusto exquisito, lleno de matices y colores vivos que nos van a dejar embobados viendo como viven el día a día nuestros aldeanos. Los entornos (incluido el carismático Onbu) están representados en un impresionante 3D, mientras que los personajes y edificios presentan encantadores sprites en 2D que parecen estar meticulosamente dibujados a mano. Esta combinación visual le otorga un encanto único y una estética cautivadora.
En cuanto al sonido cabe destacar sobre todo las melodías, que van cambiando según el bioma que vayamos recorriendo. La música se irá poniendo cada vez más tensa cuanto mayor peligro corra nuestro poblado para avisarnos de que deberemos estar preparados para cualquier evento adverso. Esta transición entre ambientes musicales agrega otra capa de inmersión a la experiencia jugable.
The Wandering Village llegará a buen puerto
The Wandering Village se destaca como un simulador de construcción de civilizaciones verdaderamente único, lo cual es muy apreciado por los aficionados al género. Al jugar, uno se sumerge en una experiencia refrescante que, aunque conserva los fundamentos de la simulación, va mucho más allá al incorporar elementos como la presencia de Onbu, la exploración y el desafío de lidiar con las toxinas. Esta combinación de elementos amplía considerablemente la experiencia de juego, brindando una sensación renovada y emocionante a cada sesión de juego.
Estamos ante un título interesante, precioso y relajante, creado por un estudio pequeño con mimo y mucho talento. Mecánicamente es sencillo pero tiene una propuesta interesante. No obstante, al tratarse de una versión preliminar, aún tiene trabajo por hacer. Los desarrolladores ya han tomado buen apunte de las carencias y aspectos a mejorar y poco a poco van a ir consiguiendo un gran juego al que habrá que ampliarle la nota de este análisis que hacemos con mucho cariño en Área Xbox.
Acerca del autor
Gamer desde los 80. Amante de los animales y el buen cine. Licenciado en Publicidad y Relaciones Públicas. A veces salgo en películas por detrás.