A lo largo de nuestra vida como video jugadores, hemos viajado a mundos fascinantes. Tierras de fantasía y ciencia ficción donde hemos cumplido aquellos sueños de los que ni siquiera éramos conscientes antes de dar ese primer paso. Hoy queremos dedicar este artículo a uno de esos estudios que lo han hecho posible a lo largo de, la todavía, joven historia de los videojuegos.
Bethesda es uno de los grandes pilares de la industria, ahora propiedad de Microsoft, y nombres como The Elder Scrolls o Fallout tienen la culpa de ello. En este caso, nos centraremos principalmente en la división de Bethesda Game Studios, la cual forma parte del conglomerado de Zenimax.
Desde los inicios hasta el esperadísimo Starfield, repasamos estas grandes sagas que llevaron a millones de usuarios a perderse por sus mundos. Una odisea entre dragones, espadas, radioactividad, seres mutantes, y que ahora va más allá de las estrellas para seguir expandiendo la leyenda de Bethesda Game Studios. Un estudio que, pese a las dificultades y a una industria que no perdona, ha sabido resarcirse y apostar a lo grande cuando debía. Ahora comienza su era más ambiciosa, esta vez, de la mano de Microsoft.
Origen
Cuando hablamos de Bethesda, lo hacemos en realidad de Zenimax Media Inc., una editora que desarrolla y distribuye desde su sede en Maryland, pero que aglutina un puñado de algunos de los estudios más importantes de la industria. Bethesda Game Studios es uno de los más grandes e importantes (por no decir el que más), y en su historial cuenta con sagas tan queridas como Fallout o The Elder Scrolls.
Sin embargo, para entender su origen debemos remontarnos a 1986, año en el que se fundó Bethesda Softworks. Aquella Bethesda fundada por Christopher Weaver, pasaría a convertirse en filial de Zenimax en 1999, año en el que se fundó esta última. El estudio llevó a cabo multitud de títulos, centrándose sobre todo en juegos de acción, deportes y carreras. De esta forma, quedaba patente la ambición de la compañía, y de hecho, se confirmaría gracias a las buenas críticas cosechadas por parte de crítica y jugadores.
Evolución
En líneas generales, sus videojuegos iban destinados a los ordenadores personales de entonces. Sistemas entre los que destacaban el Amiga, el Atari ST o el sistema operativo de Windows posteriormente (a partir de 1997). Entre sus lanzamientos más destacados se encuentran el mítico Gridiron! (1986), que se convirtió en el primer simulador de fútbol americano. Otros juegos deportivos que le siguieron fueron los Wayne Gretzky Hockey (1988) y PBA Tour Bowling (1997), que contaron con varias secuelas consecutivas.
Pero en Bethesda no sólo apostaban por los siempre atractivos juegos deportivos. The Elder Scrolls: Arena, lanzado en 1994, supuso uno de los éxitos más importantes de la compañía por aquella época, aunque esta saga la dejaremos para más adelante. Los juegos de acción también contarían con una importante presencia dentro de Bethesda. Para ello, se aprovecharon licencias tan jugosas como Terminator, saga de la que se lanzaron dos videojuegos consecutivos entre 1992 y 1993; The Terminator 2029 (con la expansión Operation Scour) y The Terminator Rampage.
Aquellos Shooters del universo Terminator tendrían una dura competencia con el mítico DOOM (1993) de John Romero. Pero Bethesda Softworks seguiría tocando otros géneros antes de pasar a convertirse en Bethesda Game Studios. Ya en 1998 llegaron a las carreras con Burnout: Championship Drag Racing (nada que ver con la famosa saga de Criterion). Y su apuesta más férrea por los juegos de conducción llegó con IHRA Drag Racing (2000), que seguía apostando por las carreras “drag”, esta vez, también en Playstation. A este le seguirían otros dos títulos más; IHRA Motorsports (2001) e IHRA Drag Racing 2 (2001).
Y de la mano de Zenimax nació Bethesda Game Studios
Desgraciadamente, aquellos títulos de carreras no gozaron de una excesiva popularidad más allá del territorio estadounidense. Sin embargo, a partir de 2001 todo cambiaría en la compañía norteamericana. Desde Zenimax se tomó la decisión de dividir los papeles de Bethesda, de manera que Bethesda Softworks mantendría su papel a la hora de publicar. Por otra parte, nacía Bethesda Game Studios, división que pasaría a encargarse del grueso de los desarrollos. Esta pasó a dar vida (entre otros) a la saga Fallout.
Desde entonces, sus pilares fundamentales han sido los ya mencionados Fallout y la saga The Elder Scrolls. Ahora, con Starfield en el horizonte, la ambición del estudio se dispara a cotas inimaginables. Pero antes de llegar ahí, te animamos a que estés atento a la segunda parte de este artículo en Área Xbox, donde repasaremos los diferentes títulos de The Elder Scrolls y su evolución a lo largo del tiempo.
Acerca del autor
He viajado a mundos que jamás creeríais, acabado con enemigos que escapan a todo misticismo. He sentido mi pulso acelerarse con cada batalla, y el suspiro de quien sabe que tendrá que volver a levantarse. Siempre hay un villano esperando y una aventura a la vuelta de la esquina.
