Análisis de Lies of P, un Soulslike que no miente

NEOWIZ GAMES, de la mano de Round8 Studio, nos trae Lies of P, un soulslike con alma propia. Adelanto que, ante todo, este juego es un verdadero reto, pero que merece la pena el intento. Cumple las expectativas y, además, evoluciona algunos aspectos que aportan mucho a este género.

Para este análisis, he sufrido (en el buen sentido) en una Xbox Series X corriendo la versión de Xbox Series X/S. En la mayor parte de esta aventura, he jugado en modo rendimiento (recomendado).

¿Lo que se nos narra en Lies of P es interesante?

Una vez que iniciamos el juego, se nos cuenta un poco por encima el contexto en el que nuestra marioneta (Pinocho) despierta. Todo parecía idílico en Krat, los humanos convivían con las marionetas que obviamente estaban a su servicio, facilitándoles los quehaceres diarios, entre otras cosas. Pero algo parece ir mal, y las que antes eran marionetas entrañables y productivas para la sociedad, ahora son despiadadas máquinas de matar.

Parece que el argumento no es nada innovador, aunque una vez que nos sumergimos en su mundo, cumple. En gran parte es por su ambientación, uno de los puntos más fuertes de este título. La historia seguirá desarrollándose a partir de los protagonistas del juego, algunos característicos como Pepito Grillo o Gepetto. A estos se les añaden personajes nuevos que aportan a la trama y los grandes jefes finales, que marcarán la diferencia.

Además, para introducirnos más en el lore, encontraremos distintos documentos repartidos por los diferentes escenarios de Lies of P. Principalmente, intentaremos descubrir qué ha ido mal, además de ayudar a otros personajes que con posterioridad nos asistirán en nuestra epopeya.

El hotel de Krat será el nexo en el que viviremos unos instantes de paz

Después de un primer capítulo en el que ya se ponen los puntos sobre las i’es, nos hospedaremos en el hotal de Krat. En este hotel, podremos conversar con los distintos personajes que ya se encontraban en él, además de los nuevos que llegarán. Pero lo importante aquí es que podremos adquirir recursos con la divisa (orbes) y pertrecharnos contra los exageradamente exigentes jefes finales.

Existe un comerciante ambulante al que también podremos comprarle recursos en distintos puntos repartidos por los múltiples niveles del juego. Pero lo que no podremos hacer con él, sí lo podremos hacer de nuevo en el hotel. Aquí se introduce la posibilidad de “montar” nuestras propias armas, tanto la hoja como la empuñadura. Esto cambiará el estilo de combate, pasando de movimientos más rápidos a más lentos pero efectivos. En términos generales, ya que existe un amplio número de armas y, por tanto, de posibilidades para modificarlas.

No solamente iremos equipados con nuestra espada, hacha, llave inglesa, etc. Sino que también contaremos con una especie de brazo mecánico que asimismo será modificable. Entre otros, este brazo puede funcionar como un gancho que atrapa a nuestros enemigos, un brazo eléctrico, de fuego… Aquí se nos abre la veda para personalizar a nuestro personaje de la mejor manera para afrontar la dura vida en Krat.

En un momento determinado, desbloquearemos a un personaje que tendrá una máquina que funciona a modo de árbol de habilidades. Cuenta con varias ramas que se irán desbloqueando una vez invirtamos cuarzo en ellas. Cada rama cuenta con cuatro habilidades y para desbloquearlas, tendremos que invertir en dos subramas de habilidades pasivas. Esto puede parecer un poco lioso pero una vez que lo vemos, es muy intuitivo. Estas habilidades pueden ser la de realizar un doble esquive, contar con más pociones de curación en nuestro haber, etc.

Pertrecharnos bien será imprescindible para avanzar

No creo que alguien se pase Lies of P sin tener que farmear un poco. Es poco probable, aunque seguramente lo veremos. Pues para asegurar nuestro éxito en las calles de la ciudad y demás escenarios, será imprescindible armarnos adecuadamente y mejorar a nuestro personaje de cuanto en tanto. Estos niveles nos exigirán mucho, por ello es importante tener calma y no precipitarnos contra los jefes por querer acabar el nivel de una (maldita) vez.

A parte de la personalización, tendremos objetos que podremos utilizar para potenciar nuestras habilidades en un tiempo determinado. Fungir nuestra arma en fuego, hielo, para doblegar al enemigo de turno. Encontraremos objetos arrojadizos tales como una especie de bombas, objetos punzantes… que nos ayudarán en más de una ocasión y que será vital preservarlos adecuadamente. Es importante recordar que en la gestión de inventario tendremos un peso limitado por lo que no podremos equiparnos de todos los objetos que poseamos.

Lies of P cuenta con niveles repletos de retos a los que enfrentarnos

Como es característico en este tipo de juegos del género, tendremos puntos de control repartidos por varios puntos estratégicos en los niveles. Durante el camino a estos objetivos, sufriremos de todo y contra todos. Los enemigos en Krat se reparten por doquier, y si bien al principio no parecen demasiado variados sí que se introducen novedades en sus movimientos. Esto nos hace replantearnos la forma en la que tendremos que enfrentarnos a ellos.

Además de sus movimientos, algunos tienen más resistencia, otros; más vitalidad. Es importante saber sus puntos fuertes, así como sus debilidades para poder afrontarlos correctamente. No queremos que estos enemigos nos quiten demasiada vida, pues encontraremos enemigos bastante potentes y no necesariamente serán jefes de sección.

El combate es la piedra angular de este Lies of P, pero tiene algo más. Como Pinocho, se nos permite tomar una serie de decisiones en las que podremos decir la verdad o no. Esto afectará a la historia y también nos puede ahorrar algún que otro combate, además de obtener mejores o peores recompensas. Aparecerá algún personaje que incluso hará que resolvamos una adivinanza, lo cual me ha parecido bastante curioso a la par que ingenioso.

Los múltiples jefes de Lies of P

Y, es aquí, en donde todo empieza y todo termina. Me he puesto un poco filosófico, pero creo que para esta ocasión no voy desencaminado. En Lies of P tendremos esa clase de jefes finales que buscaremos en Youtube para observar la mejor forma de derrotarlos. Sí, hay jefes extremadamente complicados, lo que en alguna ocasión nos hará replantearnos si el juego nos está castigando en exceso.

Estaba yo tan contento, pasando los niveles, tras sufrir ya que no solamente hay jefes finales, también existen lo que denominaremos “jefes intermedios”. Cuando me encontré, por ponerle nombre, con Andreus, el Arzobispo Caído. Sin hacer spoiler, digamos que este boss cuenta con 2 secciones, y que, para más inri, en su segunda sección cuenta con dos enemigos al mismo tiempo. Puede parecer una locura y, ciertamente, lo es. Lo es porque es un enemigo que debe pesar unas cuantas toneladas pero que se mueve como Michael Jordan bajo el aro.

Para enfrentarnos a estos jefes finales (que no los intermedios), tendremos la posibilidad de invocar a un espíritu que nos ayude en la tarea. Como sucede en otros juegos del género, funcionará como una esponja de impactos. A pesar de ello, los enfrentamientos siguen siendo muy duros y estas invocaciones serán limitadas al número de fragmentos de estrella que hayamos recogido por el escenario.

La jugabilidad, ¿este juego puede parecer injusto?

Es entonces, cuando el debate está claro, y no es otro que si Lies of P es demasiado exigente o llega incluso a ser injusto. Podemos realizar un ataque más ligero, un ataque pesado (que podremos cargar para noquear a nuestros enemigos). En ciertos niveles, podremos eliminar no a más de 1 o 2 enemigos realizando sigilo al rematarlos por la espalda. Podremos esquivar, bloquear, aunque dependiendo del arma los golpes nos bajarán más o menos vida. Y, por supuesto, realizar un parry que nos permitirá tomar cierta ventaja, aunque no demasiada.

Tras los ya comentados ataques especiales, objetos arrojadizos, y demás; es cuando sobre el papel todo parece correcto, pero cuando se ejecuta, no tanto. Sí, el juego funciona perfectamente, no se trata de eso, sino de que atacar nos deja excesivamente expuestos. Por retomar (no gracias) el combate contra el arzobispo, este se movía demasiado rápido, mientras que, en mi caso, con armas ligeras no conseguía alcanzar su velocidad.

Es por ello por lo que, una vez que estaba realizando este análisis, el juego se ha actualizado con un nuevo parche que pretende equilibrar un poco esto. Entre otros aspectos, se ve modificada la vida y velocidad del famoso arzobispo (recalco este boss para no mencionar otros, prefiero que los descubráis vosotros mismos).

Artísticamente Lies of P es macabramente hermoso

En este apartado, he disfrutado de cada uno de los escenarios que he tenido que visitar. Desde una ciudad industrial (al más puro estilo británico, como Birmingham), hasta una fábrica de marionetas, terminando en una catedral imponente, y mucho más. El trabajo artístico aquí es exquisito. El diseño de los personajes como de los enemigos está a la altura de la obra. En términos generales, es un juego que da gusto ver.

Aunque, como aspecto negativo, quizás encontramos unas físicas algo desfasadas. No solamente es problema de Lies of P, creo que es el gran “pero” de este género. Desde caminar por cornisas como Pedro por su casa, hasta generar esa sensación artificial de esquives. Creo que no habría costado tanto introducir alguna mecánica para que se sintiese más verídico. Recuerdo al Príncipe de Persia andando por las cornisas, gestionando el joystick para equilibrar a nuestro personaje, ¿sería algo tan difícil de introducir aquí?

En cualquier caso, en este apartado cumple sobradamente. Además, en Xbox Series X cuenta con dos modos gráficos. Calidad capa la tasa de fotogramas a 30, a coste de una mayor calidad de visualizado y 4k. Mientras que rendimiento se mueve a 60 fps estables y con una buena calidad de visualización, a una resolución de 4k dinámico. En Xbox Series S se moverá a 40 FPS (con HFR encendido) a una resolución de 1440 dinámico.

La tensión se siente a través del silencio

Pasear por las calles de Krat puede ser angustioso también por su silencio. Por esa sensación de vacío que se llena a través de los gritos de los enemigos o, incluso, de sus habitantes (los pocos que quedan). En los jefes sabe poner el énfasis y la música se vuelve más cañera acorde a la circunstancia. En cuanto a las voces, llegan localizadas en inglés con subtítulos en castellano.

Conclusiones

Lies of P es sin duda alguna, un gran juego. Destaca en todos sus apartados y no es un juego del género soulslike más. La historia que se nos cuenta nos consigue atrapar lo suficiente y eso es en gran parte gracias a su ambientación. Eso sí, es un juego muy exigente que incluso algunos podrían calificar de injusto. Los jefes finales pueden resultar excesivamente complejos pero el juego nos posibilita y nos incita a mejorar el equipo para afrontar estos duelos. La personalización es diferencial y permite que perfilemos a Pinocho a nuestro gusto. Artísticamente nos dejará con la boca abierta en más de una ocasión, aunque las físicas podrían resultar mejores en alguna circunstancia. El sonido cumple con lo esperado.

En definitiva, Lies of P es de esos juegos que no dejan indiferente a nadie. Lo podrás amar y te lo pasarás en grande si lo que quieres es un reto a medida. Pero si eres un jugador que disfruta más de la historia y de combates no tan exigentes, probablemente te acabe desesperando. Y bien, ¿Qué clase de jugador/a eres?

Lies of P se puede disfrutar en PS4, PS5, Xbox One, Xbox Series X/S y PC. Además, actualmente se encuentra disponible en el servicio de suscripción Game Pass o Game Pass Ultimate. Quédate con nosotros y visita nuestra página web a través del siguiente enlace.

Lies of P

8.4

Historia

8.0/10

Jugabilidad

8.5/10

Innovación

8.5/10

Audiovisual

8.5/10

Pro.

  • Soulslike con alma propia
  • Gran capacidad de personalización
  • Un gran reto que satisfará a los amantes del género
  • Artísticamente es exquisito

Contra.

  • Los jefes son demasiado exigentes en ocasiones
  • Puede pecar de injusto
  • Algunas físicas están desfasadas

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