Análisis de Remnant 2

Remnant: From the Ashes llegó a la escena de los videojuegos en el verano de 2019 con un lanzamiento que pasó relativamente desapercibido al no tratarse de un triple A y contar con un escaso presupuesto para publicidad. Sin embargo, su indiscutible calidad y las alabanzas tanto de la crítica especializada como de los jugadores lo transformaron en uno de esos tesoros ocultos que gradualmente se ganaron su lugar gracias al boca a boca. En tan solo dos años, la creación de Gunfire Games logró la impresionante marca de más de tres millones de copias vendidas, lo que prácticamente aseguró la llegada de su secuela: Remnant 2.

Ahora, esta segunda parte se destaca por sus propios méritos y, esta vez, cuenta con el respaldo del éxito de su primera entrega. Es un ejemplo viviente de cómo hacer una buena secuela, ofreciendo al jugador mucho más y mejor de lo que ya ofreció la primera parte.

La lucha encarnizada contra La Raíz

Remnant II es la continuación inmediata de su primera entrega. Nos sumerge en un intrigante escenario post-apocalíptico donde la Tierra se encuentra en ruinas a causa de una enigmática amenaza conocida como la Raíz. En esta aventura, los jugadores se ponen en la piel de un valiente superviviente al que llaman Caminante, cuya misión es explorar diversos y desconcertantes mundos con el fin de descubrir cómo detener a esta misteriosa entidad. La trama del juego, aunque sigue una premisa sencilla, está hábilmente tejida y ofrece una experiencia inmersiva.

A lo largo de su travesía, los jugadores se aventurarán por mundos fantásticos, cada uno con su propio lore y características únicas. Además, interactuarán con una rica variedad de personajes, cada uno con sus propias motivaciones y metas, lo que añade profundidad a la narrativa y brinda a los jugadores la oportunidad de sumergirse en una trama intrigante y llena de sorpresas. Aquellos que jugaron a la primera parte o incluso a la precuela de la historia principal llamada Chronos: Before the Ashes, del cual tenéis un análisis en esta misma web, tendrán una mayor comprensión del contexto y reconocerán con alegría a personajes que regresan en esta secuela. No obstante, esto no es necesario ya que la propia historia te va poniendo al día poco a poco. Además, no es precisamente la trama lo más importante de este Remnant. ¡Aquí hemos venido a pegar tiros!

Remnant 2: un Dark Souls de disparos

Remnant 2 repite la fórmula de su antecesor, presentándonos una vez más un juego de rol y acción en tercera persona que incorpora muchas características mecánicas de los juegos tipo Souls. Estas se mezclan con fuertes componentes de shooter y con elementos de saqueo en un mundo postapocalíptico que se distancia de los típicos escenarios de magia y fantasía.

Desde el principio, Remnant fue frecuentemente comparado con los juegos de la serie Dark Souls de FromSoftware, aunque con una clave de distinción: en lugar de espadas y escudos, este título optó por armas de fuego como protagonistas. El combate a tiros es una parte fundamental y la puntería es esencial, pero contar con el equipo adecuado y las habilidades apropiadas puede marcar la diferencia entre el éxito y el fracaso. Es cierto que el cuerpo a cuerpo existe pero no es un aspecto necesario del juego y, siendo sinceros, no está del todo pulido. Se nota que lo han dejado en segundo plano.

Si bien muchos podrían pensar que la similitud con la saga Souls se limita a su elevada dificultad, la verdad es que la inspiración va mucho más allá, copiando directamente mecánicas como la necesidad de descansar en puntos de control para recuperarnos, haciendo reaparecer a los enemigos básicos en la zona. Por suerte para el jugador (damos fe de ello) aquí se ofrece una gama de niveles de dificultad para que jugadores de todos los niveles de habilidad encuentren la diversión a su medida. Aún así, debéis estar preparados para un desafío de lo más exigente, incluso en el nivel de dificultad más bajo.

Importantes componentes de rol y personalización

Remnant 2 incluye esta vez más clases para los personajes. Si bien es cierto que empezaremos con las clásicas como puedan ser el Apoyo, el Francotirador o el Asalto (con diferentes nombres) a medida que vayamos avanzando y progresando iremos desbloqueando más arquetipos e incluso una segunda clase que podremos combinar con nuestra clase principal para crear un personaje único. Todo esto hace que el componente rolero, sin ser una maravilla, se sienta muy conseguido y robusto.
Para ir construyendo nuestra historia también son importantes aspectos como las decisiones que tomamos en ciertas situaciones. A esto se le suma la posibilidad de crear, mejorar y modificar nuestras armas utilizando los materiales que recolectamos, creando un personaje con ataques definidos y únicos.

Con todo esto, hay que decir que tanto el arsenal como el número de armaduras se antojan algo cortos. Podría haber más variedad de armas ya que uno de los principales intereses de este tipo de títulos es el looteo constante, el hecho de ir consiguiendo y encontrando siempre cosas nuevas. En Remnant 2 nos cansaremos de ver siempre las mismas armas y armaduras aunque con diferentes características y potenciadores.

La magia de Remnant 2 está en el cooperativo

Prepárate para forjar alianzas y vivir aventuras épicas junto a tus amigos en Remnant 2. Si bien es cierto que puedes disfrutar la aventura en solitario, la verdadera magia del juego aparece cuando te sumerges en el emocionante mundo multijugador. En este título, la colaboración entre jugadores es la clave para alcanzar niveles de diversión inimaginables. Podremos hacer un equipo de hasta 3 jugadores y los desarrolladores han dado especial atención a este aspecto, creando habilidades y sinergias que brillan aún más cuando trabajan en equipo.

A nosotros la cooperación en Remnant 2 nos ha parecido vital. Tus compañeros pueden ser la diferencia entre el éxito y el fracaso en este desafiante viaje. Jugando solo tienes que hacer frente a todo lo que se te ponga por delante y serás el foco de atención de todos los enemigos. Si juegas con amigos, ya sea distrayendo a jefes formidables, ayudándote a sortear emboscadas o defendiendo tus flancos vulnerables, trabajar en conjunto no solo hace que la experiencia sea más placentera, sino que también aumenta significativamente tus posibilidades de victoria. Repito: Remnant 2 es un juego extremadamente difícil.

Buen diseño de escenarios y enemigos

El juego nos sumerge en una variedad de mundos que capturan nuestra atención de inmediato: desde templos futuristas construidos por especies de otras galaxias a bosques poblados por criaturas mágicas, pasando por ciudades con una siniestra arquitectura victoriana. Estos ejemplos son solo la punta del iceberg, pero dan una idea del espectacular abanico de escenarios que el estudio ha desplegado para nuestro disfrute. Cada uno de estos mundos tiene como objetivo principal abrirnos paso a través de hordas de enemigos, con la esperanza de encontrar un portal hacia el siguiente nivel. Esta mezcla consigue otorgar al juego de cierta variedad pero es verdad que los jugadores nuevos que se acerquen al título van a sentirse algo perdidos. El choque estético entre escenarios es bastante fuerte y puede generar una sensación de desubicación.

Respecto al diseño de los niveles, tanto en términos de exploración como de progresión, notamos una mejora significativa con respecto a su predecesor pero no suficiente. En el pasado, algunos jugadores se sintieron perdidos en la extraña estructura de los niveles y aquí esa sensación se repite. En Remnant 2 encontramos un sistema de rutas y un mapa práctico que nos guía constantemente. Esto nos ayuda a tomar decisiones informadas sobre el camino a seguir y facilita la transición a nuevas áreas una vez derrotamos al jefe que guarda al final de cada una de ellas. No obstante, a la hora de explorar el mapa en sí, parece que siempre estamos pasando por laberintos asfixiantes que sólo pretenden desorientarnos.

Remnant 2, al igual que su predecesor, vuelve a confiar en la generación procedural para dar vida a sus mazmorras y le sienta muy bien. Sorprendentemente, la sensación de repetición rara vez se hace presente, lo que habla muy bien de cómo se ha utilizado este enfoque.

Una notable mejora a nivel técnico

En cuanto al apartado gráfico del título lo que realmente brilla en este juego es su dirección artística. Aunque no se presenta como un título que busca impresionar únicamente con su potencia gráfica, Gunfire Games ha invertido esfuerzos en mejorar aspectos clave como la iluminación, las texturas y la cantidad de enemigos. Desde el primer momento en el tutorial apreciamos un salto evidente con respecto a su predecesor.

Los mundos que visitarás en Remnant 2 son una delicia visual. Son tan variados que, en ocasiones, puede parecer que la estética carece de homogeneidad. Sin embargo como hemos señalado, esto también puede interpretarse como un punto a su favor, ya que añade una dosis de imprevisibilidad a cada partida. Además, la inclusión de elementos procedimentales asegura que cada experiencia sea única, lo que hace que sea prácticamente imposible abarcar todo lo que Remnant 2 tiene para ofrecer en una sola pasada.

El diseño de las criaturas abarca una gran variedad en apariencia y comportamiento, alejándose de los clichés habituales de la fantasía oscura. Por otro lado existen algunos detalles menos brillantes, como ciertas animaciones y la expresividad limitada de los personajes durante los diálogos. No obstante, no son problemas que estropeen la experiencia.

En lo relativo al sonido, el juego cuenta con un buen arsenal de voces en castellano, lo que añade una capa adicional de inmersión. Los efectos sonoros están a muy buen nivel y la música acompaña perfectamente en los momentos de mayor tensión y en los más relajados. El fantástico leitmotiv compuesto por Rob Westwood sigue estando presente y otorga al título de una epicidad única.

Remnant 2: más y mejor en todo

Remnant 2 no busca reinventar la rueda, pero logra entregar exactamente lo que los jugadores esperan de una secuela bien ejecutada. Se ha trabajado en la base del juego original, se han mejorado los aspectos jugables y se ha inyectado una dosis adicional de espectacularidad con sus gráficos. Además, se ha otorgado a los jugadores una mayor flexibilidad para evolucionar a sus personajes, lo que enriquece aún más la experiencia.

Este RPG de acción es un verdadero placer tanto para aquellos que buscan un reto desafiante y prefieren jugar en solitario como para los que disfrutan de las batallas en compañía de amigos (como recomendamos nosotros). A pesar de que no es un juego perfecto, ni mucho menos, el título es una prueba sólida de que los aciertos alcanzados con la primera parte no fueron simples golpes de suerte.

Este análisis ha sido realizado en su versión de Xbox Series X con un código que nos ha proporcionado Fortyseven Communications.