Lanzado el pasado 11 de enero, War Hospital es el nuevo título que edita Nacon (la misma que nos trajo el reciente RoboCop Rogue City) y que desarrolla el estudio polaco Brave Lamb Studio, compuesto entre sus filas por veteranos de la industria de estudios como Techland, Flying Wild Hog y CI Games. War Hospital , del que os traemos ahora su análisis, es el proyecto debut de este estudio y apuestan por el escenario bélico como telón de fondo. Eso sí, no esperes ser un supersoldado que ha de acribillar al enemigo. No. Aquí serás el encargado de gestionar una de las partes que pocas veces se tiene en cuenta en un conflicto bélico, los hospitales de campaña.
Una cruda historia nos espera
Así pues, el juego basa su jugabilidad en la gestión y la planificación, pero siempre con el telón de la guerra de fondo. A nivel de historia, el juego se ambienta en el año 1918 y nos pone el la piel del mayor Henry Wells, un médico militar británico jubilado. Seremos movilizados para tomar el mando de un hospital de campaña en plena 1ª Guerra Mundial. Argumentalmente, poco más hay que decir, ya que no será la historia o lo que vaya ocurriendo en pantalla el “melme” del juego. Se siente más bien como un lienzo que se ha de pintar para que se pueda desarrollar el núcleo del juego: su jugabilidad estratégica.
La jugabilidad es la esperada
En lo jugable, el juego rompe como decíamos con los canónicos juegos de batallas, ya que aquí no va de arrebatar vidas, sino de salvarlas. Eso sí, ya os advertimos que no siempre será posible y que deberemos escoger y priorizar, dejando de lado a ciertos soldados que acabarán muriendo por no recibir la atención médica precisada. Por ello, se trata de un juego crudo, que nos mete de lleno en lo peor de los seres humanos y sus consecuencias.
Los primeros compases del juego servirán a modo de tutorial y nuestras tareas serán sencillas, pero ya se empieza a vislumbrar uno de los principales fallos del juego: una interfaz de usuario muy tosca. A pesar de lo que nos van explicando en el tutorial, a medida que se desarrolla la partida, War Hospital no es muy amigable con los menús y la navegación entre ellos, así como su visualización. Entendemos que siempre es difícil trasladar un juego de estrategia a consolas. La estrategia nació y domina en el mercado del PC, pero ya ha habido muchos juegos que, en su versión a consolas, han sabido adoptar esos menús y esa navegación a un mando y una tele. Además, será ahí donde pases más tiempo ya que, como juego de gestión, nos tocará decidir entre muchas pestañas y menús nuestras acciones a realizar.
Multitud de tareas a realizar y decisiones que tomar
Hablando de la jugabilidad propiamente dicha, deberemos microgestionar el bienestar, las tareas y los horarios del personal. Todo ello preservando y generando una multitud de recursos. y por si fuera poco, también deberemos defendernos de los enemigos que avanzan hacia el hospital. En War Hospital sólo podemos perder la partida por dos causas: o nuestra moral cae hasta perderlo todo, o perdemos una de las escaramuzas en el frente de batalla. Pero realmente no estamos ante un juego retante en cuanto a su dificultad. En todo caso, se podría calificar de “agobiante”, pero no en un sentido peyorativo de la palabra, sino derivado del exceso de tareas/problemas a resolver y la frecuente falta de recursos humanos para ello.
Con el paso de las horas, todo se siente algo repetitivo y ya visto anteriormente. Los pocos elementos aleatorios o inesperados vienen en forma de resultados de la cirugía y el tipo de pacientes que llegan. Se agradecen algunas historias paralelas que desarrollan en el juego pero que, a nivel jugable, tiene escasa o nula recompensa, más allá de saber como acaba esa “minihistoria”. También podrás acelerar o desacelerar la velocidad del juego, opción ya clásica en casi todos los juegos de estrategia.
En lo visual y lo técnico…
Lo que si he de decir que me ha agradado bastante es el tono que emplea el juego, tanto en lo visual como en lo sonoro. La oscura paleta de colores que emplea constantemente el juego, nos da ese “mood” de estar metido en una tarea de lo más triste posible y rodeado de muerte y caos por todos lados. Te da esa sensación de no ser un superhéroe de guerra sino de hacer lo posible con lo que tienes a mano, e intentando salvar al mayor número de gente posible. No disponemos de selector de modos gráficos y el juego cumple en su aspecto visual
Se utiliza adecuadamente colores sombríos para los desesperados tiempos de guerra. Además, los retratos de los personajes y los modelados del juego son bastante dignos. En lo sonoro, el juego cumple con lo esperado y la BSO acompaña las más de 20 horas que te puede durar el juego. Los efectos sonoros son acertados y aunque alguna cinemática carece de subtítulos, todas las escenas narrativas están bien subtituladas al español.
En la versión de Xbox Series X en la que lo hemos jugado, el Quick Resume funciona bien pero en este tipo de juegos siempre es preferible guardar bien la partida en un slot aparte y hacerlo frecuentemente. Es muy importante grabar la partida de manera habitual no solo por si te equivocas en alguna decisión, sino porque también hemos experimentado algún bug que hacía que entráramos en un bucle jugable del que no había manera de salir. Eso sí, es justo reconocer que con reiniciar la partida, la mayoría de ocasiones se solucionaba.
En definitiva, War Hospital…
En definitiva, War Hospital es un juego de gestión/estrategia que ofrece muchas horas de lo que uno viene a buscar aquí: gestionar un hospital de campaña con todo lo que ello conlleva. A pesar de algún bug y de sus farragosos y toscos menús, estamos ante un juego que cumple lo que promete. Puede ser que esté dirigido a un nicho muy concreto de jugadores, pero siempre servirá para todos aquellos jugadores que busquen de una experiencia “bélica” diferente pero igual o más cruda que otras.
Pro.
- Gestión y Decisiones a tomar
- Tono visual del juego
Contra.
- Algún bug que obliga a cargar partida
- Menús e interfaz tosca
