Análisis Bramble: The Mountain King

Dimfrost Studio un novel estudio creado por estudiantes universitarios allá por 2017, lanzan su segundo juego. Bramble: The Mountain King es un juego sencillo a la par que bonito. Una experiencia inmersiva, que nos hará volver a nuestra más tierna infancia. Te traemos este análisis en Xbox Series X para que te pongas las zapatillas, te sientes en el sillón y abramos este cuento juntos.

Bramble: The Mountain King un cuento hecho videojuego

Bramble: The Mountain King es una aventura ambientada en un mundo inspirado en fábulas nórdicas. El tono de cuento es realmente fantástico y te mete de lleno en la historia haciéndote sentir que estás pasando las páginas de un cuento tradicional.

Controlaremos a Olle, un niño junto a su hermana se transporta a la mágica tierra de Brumble. Allí, tras disfrutar con sus extraños y simpáticos seres, descubre que no todos son tan amigables y un enorme trol secuestra a su hermana mientras él consigue escapar por poco. A partir de entonces, se verá obligado a moverse por este peculiar mundo encantado repletos de seres. Gnomos, hadas, trols, sapos, gigantes y algunas criaturas despiadadas, así como brujería, habitarán en sus bosques.

El juego se plantea como un walking simulator, con partes de plataformas y con algunos momentos de acción de “lucha” contra enemigos o de infiltración. También tendremos un pequeño componente de exploración y de acción, así como pequeños juegos con otros personajes más amables. Puede recordarnos a juegos como Little Nightmares, Limbo o Inside en su desarrollo y mecánicas, y claramente, parecen fuente de inspiración de este título. Pero, sobre todo, es un juego para deleitarnos con su vistoso y bonito apartado gráfico y disfrutar y transportarnos a este mundo de fantasía.

Preciosismo gráfico

La recreación del ambiente y los escenarios típicos de los cuentos es un trabajo realmente sobresaliente. Bosques, montañas, cuevas y cientos de hojas oscilando con el viento. Al mismo tiempo gozaremos de unos asombrosos efectos de luz que crean un ambiente casi pictórico. También las partículas, de polen y polvo, crizándose con los rayos de luz, generan escenas memorables que podremos quedarnos contemplando. A ello se une el descomunal tamaño y el excelente diseño de algunos de estos personajes de fantasía. Todo ello a 60fps, bastante estables, y con una resolución a 4K que le da al juego un aspecto extraordinario y que te dejará con la boca abierta.

Los protagonistas, son los que gráficamente parecen más pobres, pero el aspecto de “muñecos” parece intencionado y con el fin de hacernos sentir más aún dentro de un cuento encarnado en forma de videojuego. Las animaciones de estos también resultan algo más artificiales que las del resto de seres, que se mueven con mucha más fluidez, otorgándoles casi un aspecto de marionetas a merced de muchos de los enormes seres que pueblan este mágico mundo.

El apartado artístico ha sido ampliamente trabajado y eso se deja ver en el resultado final del juego. Pese a ser un título indie, supera, en este apartado, a algunos juegos de mayor presupuesto tanto en gráficos como en el cuidado de detalles.

Se plantea en acción en 3d, con toques más clásicos en 2d para determinados momentos de plataformeo.

Sonido y jugabilidad

El ambiente sonoro es realmente magnífico también, acompañando con chillidos y los sonidos propios del bosque. Destaca especialmente la voz en off de un narrador (en inglés, eso sí), añadiendo más fuerza al tono de cuento del juego. La música es orquestral y sirve para remarcar momentos de tensión, enfrentamientos, sigilo… Aunque en determinados momentos tendremos canciones cantadas, muy asociadas al folclore nórdico que le dan un aire trascendente muy interesante.

Jugablemente hablamos de un juego muy simple, en el que empleamos pocos botones. Así que, la facilidad para hacerse con el juego, es casi insuperable. Además los controles responden muy bien en saltos, agarres… Eso sí, no hay niveles de dificultad, sólo el que viene por defecto, que equivale a una dificultad normal, que unido a su escasa duración, puede hacer que lo acabemos en sólo unos días. En pasando la mitad del juego hay algo más de reto, con saltos más ajustados y puzles algo más elaborados.

Echamos de menos una opción de desactivar la vibración, que aunque está muy bien implementada, siempre hay jugadores que prefieren desactivarla por defecto. Otro punto algo negativo son los tiempos de carga, algo largos para un juego indie y, a veces, frecuentes.

Conclusiones Bramble: The Mountain King

Bramble The Mountain King es un juego encantador que nos hace retroceder a nuestra niñez. Incluso cuenta con el componente oscuro que tienen muchos de los cuentos tradicionales. Ya que, aparecen algunos seres terroríficos que hacen que el juego, pese a tener tono de cuento, no sea recomendable para niños de corta edad. Y es que cuenta con un componente de terror y sangre, mucho más presente en la segunda parte del juego.

El juego se inspira en los ya clásicos Limbo, Inside o Little Nightmares, pero toma su base, para darle su propio estilo en entornos 3d y dotarle de una preciosa historia detrás.

Su corta duración puede ser un revés para muchos (3-4h), pero su precio no excesivamente alto y su sublime apartado gráfico, unido al buen nivel general y a una bonita historia, hacen de él un imprescindible para los amantes de los cuentos y leyendas.

8.9

Gráficos

9.3/10

Sonido

8.3/10

Jugabilidad

9.0/10

Pro.

  • Aspecto gráfico impecable
  • Tono y ambientación de cuento

Contra.

  • Muy corto
  • Tiempos de carga

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Extermino alienígenas. Jugón y cinéfilo

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