Análisis WRATH: Aeon of Ruin – Un shooter de los clásicos

Doom, Quake, Duke Nukem… Seguro que conocéis perfectamente todos estos títulos, y el boom que supusieron en el momento de sus respectivos lanzamientos originales. WRATH: Aeon of Ruin, de 3D Realms, viene a recoger el testigo de estos padres del género shooter FPS tal y como lo conocemos.

Con esta breve introducción ya estáis más que listos para leer este análisis. Por tanto, vamos a ello:

WRATH: Aeon of Ruin cuenta con una jugabilidad tan clásica como rápida

La jugabilidad de WRATH: Aeon of Ruin sigue una premisa muy simple: movernos a una velocidad de vértigo y disparar a todo lo que se mueva mientras recogemos recursos y llaves para abrir puertas y poder seguir avanzando. Por eso su inspiración está tan clara, porque eso básicamente es lo que hacíamos en los juegos mencionados en el primer párrafo de este texto. Contamos con varias armas que van desde una simple pistola, hasta la típica escopeta de doble cañón u otras más ficticias como un lanzacolmillos o lanzabolas de ácido. Siendo el arma “principal” una cuchilla que, además de infligir daño, nos permitirá llegar a lugares a priori inaccesibles gracias a su ataque cargado.

Sin embargo, me resulta imprescindible mencionar que la dificultad del juego está demasiado artificialmente elevada. Me explico: puedes tener la salud y la armadura al máximo (que, por supuesto, estas no se regeneran automáticamente y debemos recogerlas por el escenario), que a los enemigos no les llevará más de apenas 10 disparos quitártelo todo y matarte. Para ello, es vital esquivar sus balas, pero es algo que se antoja demasiado complicado cuando te están rodeando entre -sin exagerar- alrededor de 15-20 enemigos que pueden ser casi tan rápidos como tú. El guardado de partida es manual y limitado, aunque podemos convertirlo en infinito gracias a las distintas opciones que nos otorga el título. Este será el único ajuste que podremos realizar respecto a la dificultad.

Está bien tener inspiraciones de los 90, pero ya estamos en 2024

Como ya he comentado, las inspiraciones de WRATH: Aeon of Ruin están más que claras, mirando fijamente hacia la mágica época de los 90. No obstante, esto puede ser un punto tan positivo como negativo, según cómo se realice. En este caso, teniendo en cuenta su notable repetitividad, no tan espectaculares entornos y casi nula innovación, creo que se trata más bien de un punto negativo.

Personalmente, considero que, encontrándonos ya en 2024, resulta algo pobre lanzar una propuesta que se limita a ser muy parecida a los padres del género, sin aportar prácticamente nada novedoso y conservando incluso algunos de los puntos negativos que contenían estos, como la mencionada repetitividad. Durante toda la aventura estaremos haciendo lo mismo: correr, disparar y encontrar algún que otro secreto mientras avanzamos por distintos niveles. No hay nada más, y para colmo tampoco es que haya un amplísimo abanico de enemigos, pero sí que los hay de todo tipo con aspectos espeluznantes, como voladores, terrestres, acuáticos… Por otro lado, los escenarios son más oscuros y tétricos, pero nada espectaculares a pesar de incluir interiores de enormes castillos o extensos exteriores. Digamos que, seguramente, no te invitarán a quedarte mirándolos atentamente por su preciosidad.

Gráficos y optimización excelentes

La jugabilidad no es lo único con sabor añejo, sino que los gráficos también recuerdan a épocas ya pasadas, con retoques que los hacen algo más modernos. Aún así, en esencia, el apartado técnico viene directamente de la época de los 32-64 bits en consolas. Polígonos (que no sobresaltan demasiado, porque eso afearía los modelos) y un toque de pixelart se dan la mano para entregarnos un apartado visual más que correcto con una optimización excelente que nos ofrece unos muy necesarios 60 fps sin decaer en ningún momento. Eso sí, no esperéis mejoras como una tasa de 120 fps, resoluciones demasiado altas, etc., ya que el juego no dispone de una versión dedicada a Xbox Series X|S, aunque sí cuenta con la fantástica función de Quick Resume en las últimas consolas de los de Redmond.

En definitiva, WRATH: Aeon of Ruin se queda a medio gas

Tras todo lo comentado y para concluir, puedo decir que WRATH: Aeon of Ruin es una propuesta interesante en sus mecánicas jugables y en lo técnico con una optimización sublime, pero no innova apenas nada y se puede llegar a hacer bastante repetitivo muy pronto. Además, su elevada dificultad de manera artificial no ayuda en absoluto. No es un juego que no pueda recomendar como tal, pero sí considero que hay experiencias mucho más satisfactorias que la aquí presente, por precios además similares o incluso inferiores. Por tanto, solo puedo recomendarlo si eres un fan acérrimo del género y si tienes suficiente paciencia. Si ese es tu caso, seguramente podrás llegar a disfrutarlo mínimamente.

Tráiler de lanzamiento 1.0 de WRATH: Aeon of Ruin (ft. Sakis Tolis) | 3D Realms

WRATH: Aeon of Ruin está disponible para Xbox One, PS4, Nintendo Switch y PC. Recordad que en Área Xbox siempre os estaremos trayendo toda la actualidad, artículos y análisis de vuestro hobby favorito.

WRATH: Aeon of Ruin

6.5

Nota

6.5/10

Pro.

  • Capta la esencia de shooters FPS clásicos como Doom o Quake.
  • Jugabilidad y gráficos con sabor a clásico y con la velocidad muy presente.
  • Optimización excelente, aunque...

Contra.

  • ... No cuenta con optimización para Series X|S.
  • Dificultad artificialmente elevada.
  • No innova realmente en nada.

Entradas relacionadas