Análisis Explosive Jake

Puede que algunos no os acordéis. O ni tan siquiera conocierais aquella época en la que los videojuegos se disfrutaban con la «asombrosa resolución» que nos brindaban aquellas teles de tubo. Clásicos que hoy forman parte del terreno retro, y que tan en auge están de nuevo. Esa experiencia es precisamente la que ofrece Explosive Jake, adaptándose eso sí a las nuevas tecnologías. Y es que más allá de sus diferentes apartados, o de la jugabilidad, que tanto recuerda al clásico Bomberman, este es un título realizado para dar esa sensación. El hecho de que pertenece a una época que no es la suya.

Gráficos

El aire retro se palpa desde el momento en el que se muestra la primera pantalla. PigeonDev ha creado un título con la intención de devolver a más de un nostálgico a aquella época tan bonita del videojuego. Una en la que la industria en general, era más bien un nicho en el que pocos se animaban a adentrarse seriamente. Buena parte de lo que le otorga ese carácter al juego, es un efecto tan simple como efectivo que consiste en darle un efecto curvo a la imagen. A su vez, se resaltan las esquinas con un brillo extra, que en conjunto recuerda a las televisiones de tubo de antaño. Puede parecer una menudez, pero queda realmente fantástico.

Los diferentes mapas y niveles, muy coloridos, presentan unos escenarios ricos dentro de lo que son sus características. El diseño de estos y de los diferentes elementos son bastante decentes, y los enemigos también van cambiando a medida que avanzamos, dando lugar a personajes diversos y bien caracterizados. Los efectos son básicamente correctos, pero atendiendo al tipo de juego ante el que nos encontramos, el resultado en conjunto está bastante bien. Se echa en falta una mayor variedad en cuanto a la paleta de colores, pero aun así cumple. Más sencillos son los menús, poco trabajados y sin carisma.

Sonido y textos

Si se pretendía una ambientación y un aspecto retro, la música de este Explosive Jake no se ha quedado atrás. Aunque un poco repetitiva, sus melodías son de esas que se quedan grabadas sin uno darse cuenta. No es comparable a otras grandes producciones claro está, pero acompaña muy bien al conjunto. Como decía, un juego redondo en lo que pretende lograr a través de las sensaciones.

Un buen detalles, es que el juego viene traducido al castellano. Y no es que sea algo estrictamente necesario. Todo es muy sencillo, incluidos los menús y la información que se nos muestra, pero igualmente se agradece. Datos curiosos como el tiempo que tardamos en completar el nivel o la puntuación, así como los principales menús para el volumen y algún que otro ajuste son fácilmente accesibles. Como curiosidad, puede que no os halláis percatado aún, pero la fuente empleada para estos menús es la misma que la de la saga Grand Theft Auto.

Jugabilidad

El apartado jugable de este título es sorprendentemente adictivo. La sencillez, una vez más siendo definitoria, no opaca el concepto general, y Explosive Jake se convierte automáticamente en un «come horas». Cuando os deis cuenta, habréis jugado como hora y media o dos horas como si fuesen veinte minutos. Su control y mecánicas son muy simples, pero el hecho de incluir multitud de enemigos, trampas y secretos escondidos, nos incitan a querer seguir avanzando.

Entre estos pasadizos y cajas, nos aguardan enemigos que se mueven de formas diferentes, aunque manteniendo siempre la misma trayectoria. Para acabar con ellos, debemos utilizar las bombas de Jake, depositándolas de tal manera que la explosión abarque el radio en el que se mueven. Por supuesto, hay un punto de estrategia a tener en cuenta, ya que las trampas también nos complicarán la vida, y es que hay que calcular bien donde y en qué momento soltar las bombas sin que nos afecten. Si morimos, empezaremos el nivel de nuevo.

El objetivo final es encontrar los botones, llaves y puertas que nos permitan seguir avanzando de nivel en nivel, que por cierto, son muchos. Para ello, hay que ir explotando las cajas, que ocultan todos estos secretos a lo largo de los diferentes mapas. Como dato negativo, he tenido cierta dificultad en algunos momentos en los que trataba de soltar las bombas. A pesar de pulsar el botón A, a veces el personaje no reacciona, y esto puede suponer la muerte y reinicio de un nivel entero. Una respuesta poco pulida desde mi punto de vista.

Duración

Explosive Jake no es un juego demasiado largo, a pesar de que cuenta con 40 niveles llenos de esqueletos, caballeros, trampas mortales, y mucho más. Su condición de indie no engaña, y aunque es un título perfecto para disfrutar en partidas rápidas, no lleva mucho tiempo completarlo. En poco más de 4 horas es posible acabar sus diferentes niveles, una cifra que puede variar en función de nuestra habilidad, ya que hablamos de un juego que castiga bastante los errores.

Conclusión

Seguramente Explosive Jake no sea el juego más indicado para conquistar a un público general. De hecho tampoco lo pretende, pero sí que podría conseguirlo con ese grupo de jugadores específicos que busca una experiencia retro similar a otros juegos del género. Es divertido y adictivo, pero además, está dotado con un apartado visual especialmente llamativo por ese efecto de televisor de tubo. Un detalle sin mayor importancia que, sin embargo, aporta mucho a la experiencia. La parte negativa, la protagonizan los controles, no tanto por que estén mal distribuidos o sean poco intuitivos, sino por la pobre respuesta que dan a veces. A veces no basta con pulsar una vez, y eso puede resultar molesto y hasta condicionar de mala manera las partidas. Por lo demás, el resultado es bueno, con una banda sonora que acompaña muy bien.

Explosive Jake

4,99
5.1

Gráficos

5.5/10

Sonido y textos

6.0/10

Jugabilidad

4.7/10

Duración

4.0/10

Pro.

  • Muy adictivo
  • Más de 30 niveles diferentes
  • Apartado visual retro bien conseguido

Contra.

  • Los controles no siempre responden como deberían
  • Se echa en falta una paleta de colores más amplia

Acerca del autor

+ Ultimas Entradas

He viajado a mundos que jamás creeríais, acabado con enemigos que escapan a todo misticismo. He sentido mi pulso acelerarse con cada batalla, y el suspiro de quien sabe que tendrá que volver a levantarse. Siempre hay un villano esperando y una aventura a la vuelta de la esquina.

Entradas relacionadas

Deja tu comentario