Corrían los años 40 y 50 en Nueva York, tiempos difíciles en los que las convulsas calles de la gran ciudad se teñían de sangre y corrupción. La droga y otros negocios de dudosa legalidad enturbiaban cada esquina de Empire Bay. Los bajos fondos, dominados por las familias, son una constante fuente de violencia en la que cada bando se retroalimenta del otro. Y ahí estaba Vito Sacaletta, un joven de ascendencia italiana recién llegado de la guerra. La vida no era fácil, y Vito pronto se vio envuelto en…
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