Análisis de Nikoderiko the Magical World, un viaje a los plataformas de los 90

Análisis Nikoderiko

Quizás muchos de vosotros, como yo, crecisteis en la época de la lucha fratricida entre Super Nintendo y Mega Drive. Si bien puede ser que haya otros tantos que esta época les resulte totalmente desconocida, si que creo interesante empezar este análisis aclarando lo que para muchos sigue siendo la época más dorada de los arcades plataformas. Sin duda, los años 90 estuvieron llenos de propuestas que basaban su potencial en el entretenimiento basado en unas plataformas directas y entretenidas. Y hoy os queremos hablar de un nuevo juego que recoge todo ese espíritu: este es nuestro análisis de Nikoderiko The Magical World.

Estando disponible desde el 15 de octubre en consolas y más adelante en PC, lo que nos propone la buena gente de VEA Games es volver a esa época que abarca juegos desde Donkey Kong Country hasta Crash Bandicoot. Afirmado por el propio estudio, este juego es una carta de amor a todos esos plataformas que llenaban nuestras tardes con horas y horas de diversión.

En estos juegos, la historia es lo de menos

Si bien a nivel de historia no plantea nada muy reseñable (la típica historia en la que dos protagonistas descubren un artefacto de importante poder pero que es arrebatado por el villano de turno y deben recuperarlo), lo que propone no quiere ir tampoco más allá y busca ir directamente a lo que sabe hacer, entretener con plataformas.

Así pues, lo que nos espera es un juego claramente inspirado en los citados títulos de los 90. Por ello, nos desplazaremos en un escenario a través de niveles con todo tipo de obstáculos, enemigos y trampas que superar para poder llegar al final de esa fase. Dicho avance será mayoritariamente lateral, de izquierda a derecha, aunque el juego en algunas ocasiones cambiará la perspectiva y, al más puro estilo Crash, viraremos la cámara para ver el protagonista en el centro de la pantalla y teniendo que avanzar de manera más directa hacia “adelante” y no hacia la derecha.

Un desplazamiento clásico y que no necesita mucho más

En todo caso, sea de una manera o de otra, los objetivos no cambiarán y a través de saltos, planeos y rebotes, deberemos avanzar cueste lo que cueste. En nuestro camino tendremos enemigos que nos lo pondrán difícil, y una de las cosas que me ha gustado es que no a todos los podremos eliminar saltándoles encima. Aunque a muchos sí, en otros casos deberemos dar un salto para caer con fuerza con ellos (o al lado de ellos) para eliminarlos. Otros serán directamente indestructibles y será mejor no pasar muy cerca de ellos. Otros nos dispararán bolas de fuego, irán saltando para ponernos más difícil su eliminación, etc. En definitiva, un variado surtido de enemigos que hace interesante el viaje en cada nivel y hace que no te aburras de ellos.

Respecto al contenido puramente plataformero, tendremos también los clásicos mecanismos de este tipo de juegos: plataformas que caen al poco de pisarlas, secciones con timing en las que pasar en un momento determinado y los saltos marca de la casa en los que en muchas ocasiones hay que encadenar una secuencia de ellos para no caer al vacío. En este sentido, como en otros tantos, poca innovación por parte del estudio, pero entiendo que es así de intencionado, puesto que en todo momento me ha dado la sensación de que lo que los desarrolladores quieren es juntar en un título todo lo que los diferentes juegos nos proponían, sin más ánimo que el de entretener y asumiendo que ya está todo inventado en el género.

Análisis Nikoderiko

Las plataformas, acompañados, se disfrutan más

Otra mecánica que me ha resultado interesante es que en algún segmento de algunos niveles nos podremos servir de alguna mascota. Tendremos 3 de ellas y, además de tener capacidades especiales como un mayor salto, poder “absorber” enemigos para expulsarlos después, etc, servirán para ciertos niveles (acuáticos o por el cielo) en los que sólo podremos avanzar con ellos. Le añade esa variedad necesaria en este tipo de juegos que, sin ella, pueden caer algo en la repetitividad.

Respecto a la dificultad, el juego es amable con todo tipo de jugadores. Al inicio de la aventura deberemos escoger entre el modo fácil y el modo normal. Ya en el modo normal el juego es bastante asequible así que entendemos que el modo fácil está dirigido a los más pequeños de la casa o a aquellos que se inicien en el mundo de los videojuegos. El propósito del estudio es no dejar a nadie fuera e intentar abarcar el mayor número posible de jugadores.

Un juego accesible para todos

Obviamente, el que quiera dificultad, la tendrá. Si lo que buscas es hacerte el 100% del juego y exprimir a base de bien cada nivel, no te faltará contenido ya que hasta aquí Nikoderiko se refleja de manera fiel en los clásicos de la época. En cada nivel tendremos varios objetos secundarios a recoger. En todos ellos tendremos un diamante especial a encontrar, dos llaves que conseguir encontrando y superando las fases secretas y 4 letras (NIKO) al más puro estilo Donkey Kong.

Tanto las 4 letras como el diamante estarán esparcidos en el nivel y será tarea nuestra buscar en cada esquina del nivel para hacernos con ellos. En cambio, para acceder a las llaves, deberemos también encontrar 2 barriles por nivel que nos darán acceso a una fase bonus en la que, siempre con un contador de tiempo, conseguir un objetivo determinado. Bien sea acabar con todos los enemigos o conseguir todas las estrellas, aquí el reto si que puede ser algo más elevado que el juego en general y entrañará algo más de dificultad.

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Podrás ser todo lo completista que quieras

Todas esto, además de las “monedas” que vamos recogiendo por el escenario, nos servirá para cambiarlas por algo más en el taller. Tendremos 3 posibilidades: o bien un cofre “normal” (que nos desbloqueará coleccionables, de arte, música, etc) o bien un cofre “premium”, que nos dará alguna figura o 3 monedas especiales. Estas monedas especiales servirán para “alquilar” un uso de una montura en el nivel que queramos. Podremos gastarlas en una de las 3 monturas que después podremos “invocar” en segmento del nivel que queramos. Si bien es una buena idea, he de decir que pocas veces o ninguna las he utilizado y que los niveles son perfectamente completables sin la ayuda den estas mascotas.

Tampoco faltarán los jefes finales. A lo largo de los 7 mundos que recorremos (con unos 4 o 5 niveles cada mundo), culminaremos el mismo con una batalla ante un jefe final. He de decir que los primeros mundos han sido muy asequibles, sólo complicándose en los 2 jefes finales. Cada uno de ellos contará con varios ataques y trampas que pedirán de ti lo aprendido en los niveles previos, pero que con un poco de desempeño no te traerán muchos quebraderos de cabeza.

En definitiva, y para acabar con el apartado de la jugabilidad, estamos ante todo un homenaje a los clásicos que se afianza en las bases ya asentadas y que pone todo en manos del jugador para que sea él cuanto se quiere “complicar” la vida. Siendo bastante accesible para todos, dependerá de ti si quieres ir a por el 100% y conseguir todos los objetivos de cada nivel. Con una partida normal en la que encuentres varios objetivos, puede durarte unas 8 o 9 horas.

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Análisis Nikoderiko: Su apartado audiovisual cumple correctamente

En el apartado audiovisual, he de decir que el juego tiene un estilo cartoon muy “friendly”, muy cercano a lo que Pixar puede hacer, pero salvando las lógicas distancias. Tanto Niko como Luna serán los protagonistas (sin diferencias entre ellos a nivel jugable) y el mundo que les rodea está muy bien recreado y con todo lujo de detalle. La alegre paleta de colores escogida y lo llamativo del aspecto visual sirven a una jugabilidad entretenida. Además, su música es agradable y suave, sin resultar repetitiva pese a su escasa variedad.

Unos tiempos de carga excesivamente largos

Donde si tengo algo más de queja es en el aspecto técnico. Aunque es de agradecer el haber traducido los textos al español, no nos hemos librado de algún error en el que los textos salían en inglés. Seguramente este se arregle fácilmente con algún parche tras su lanzamiento. Aún así, mi mayor “pero” tiene que ver con los excesivamente largos tiempos de carga. Hemos jugado en Xbox Series X y el tiempo de carga de cada nivel creo que es demasiado teniendo en cuenta el tipo de juego en el que estamos y viendo la velocidad de los discos duros de las consolas actuales. Por ello, creo que se trata de un tema de falta de optimización en este sentido.

En conclusión, Nikoderiko…

Aún así, esto no empaña lo que creo que, en líneas generales, es un juego muy disfrutable. A modo de conclusión, he de decir que si lo que te gustan son las plataformas, sin duda te gustará Nikoderiko the Magical World. Siendo toda una carta de amor a los Donkey Kong y Crash Bandicoot, su bello mundo y sus accesibles plataformas te dejarán un muy buen sabor de boca seas el tipo de jugador que seas. Recomendado para los que busquen entretenimiento y plataformas en un mismo título.

7.9

Nota

7.9/10

Pro.

  • Entretenido y directo
  • Contenido opcional para el completista

Contra.

  • Tiempos de carga demasiado largos
  • Algún fallo en la traducción de los textos

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