Probamos Towerborne: Un Beat ‘Em Up RPG

Towerborne

Towerborne es el nuevo juego publicado por Xbox Games Studios y desarrollado por Stoic, conocidos por dar vida a las tres entregas de The Banner Saga. En esta ocasión estamos ante un título un tanto peculiar, que mezcla la jugabilidad de un beat ’em up con elementos RPG. Antes de nada, aclarar que he podido probar una versión previa del acceso anticipado en Steam, por lo que la calidad no es representativa de la versión final y que los fallos y falta de contenido son cosas que podemos esperar. El acceso anticipado comienza oficialmente el 10 de septiembre.

La historia de Towerbone

La historia de Towerborne es prácticamente un apocalipsis. El mundo vivía en paz, poblando pacíficamente los campos, las montañas y demás, hasta que unos monstruos aparecieron, invadiendo el territorio. Poco a poco, con la sucesión de múltiples batallas, lograron acorralaron a la humanidad a vivir en una torre llamada el Campanario, la última esperanza.

Nuestro personaje es uno de los defensores del lugar, un as renacido con las habilidades necesarias para darle la vuelta a la situación. Poco a poco iremos avanzando en la reconquista del mundo, aprendiendo más sobre los monstruos y su origen.

La jugabilidad es muy completa

La jugabilidad de Towerborne es muy sencilla, aunque no por ello menos completa. Tenemos cuatro clases entre las que elegir, que, a falta de la traducción al español, serían Sentinel, Pyroclast, Rockbreaker y Shadowstriker. Cada una se centra en un estilo de juego diferente, con sus habilidades y estadísticas distintivas además de un nivel independiente. Con Sentinel llevamos espada y escudo, podemos bloquear y hacer parrys, aunque luego el daño no es el más potente. Pyroclast utiliza una maza, que además puede aprovechar para ejecutar ataques de fuego. Rockbreaker hace uso de su fuerza para golpear a los enemigos con puños especiales y Shadowstriker posee una agilidad inusual, que combina con dos dagas rápidas.

Cada clase sólo puede acceder a un tipo de arma, pero pueden compartir el resto de equipamiento. Por otro lado, cada arma equipada tiene a su vez sus propias habilidades y efectos pasivos, por lo que tenemos muchas posibilidades para crear sinergias poderosas, incluso hay diferencias entre armas iguales. Por ejemplo, tenemos dos bastones idénticos, pero uno de ellos aumenta al daño un tanto por ciento mientras que el otro aumenta los críticos. También las armas y armaduras tienen un nivel, que podemos subir mediante el herrero de la torre, aunque también conseguiremos equipo y diversos objetos en las misiones. Por último, están los umbra, unas criaturas bastante monas que nos acompañarán en nuestra ventura y que nos proporcionarán ataques especiales y diversos efectos.

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Los combates y el mapa del mundo

Los combates son puro beat ’em up, es decir, nosotros contra muchos enemigos. Puede parecer que estaremos en desventaja, pero gracias a la cantidad de combos y habilidades que podemos hacer desde el inicio, la cosa se equilibra. Si que es cierto que la primera partida se me hizo un poco cuesta arriba, pero una vez equipado con mejor armadura, la cosa cambió bastante. Decir que el movimiento del personaje cambia mucho entre clases, a más ágil sea, más fluido el movimiento y más rapidez en los ataques, pero en general se siente bien con todas. La variedad de enemigos también está bastante bien, algunos requerirán de ciertos ataques por nuestra parte, por ejemplo, para romper un escudo o aturdir unos segundos a un jefe.

Un punto muy importante es el mapa del mundo. Está dividido en celdas, y para movernos necesitamos ir completándolas, aunque cada cierto tiempo se da acceso a una zona más amplia. En cada celda nos espera una misión, que requerirán, o más bien recomendarán, que tengamos equipamiento de cierto nivel. De vez en cuando habrá celdas más complicadas, a modo de jefes, aunque podremos hacer uso del modo cooperativo y unir fuerzas con amigos, además, podemos cambiar de clase en cualquier momento, si así lo vemos necesario.

Apartado técnico y audiovisual

Towerborne es un título estéticamente muy bonito, todo parece dibujado. Los escenarios están llenos de movimiento y son detallados y coloridos, es casi como si a pesar de la grave situación que atraviesa la humanidad, todo estuviera en paz. Los temas musicales son muy relajados, sobre todo en los menús y en la zona de la torre, en las misiones son más movidos, pero no agresivos. En cuanto a las voces, no hay, solo tenemos los textos, que por ahora están íntegramente en inglés.

En lo técnico es donde vemos muy claro que se trata de un acceso anticipado, en PC hay carencias de opciones, podemos ajustar muy pocas cosas en comparación a otros títulos. Durante mis horas de juego tuve algunos bajones de FPS un tanto aleatorios, aunque no tengo muy claro si fueron por el propio juego en sí o por la conexión con los servidores. Tampoco es compatible con resoluciones ultrawide. Por otro lado, cabe recordar que el juego continúa en desarrollo y es muy probable que estos aspectos mejoren.

En definitiva, Towerbone…

Es un juego que apunta alto y que va por buen camino. Las sensaciones al jugar son muy buenas, el combate es divertido y hasta cierto punto estratégico y además es bonito de ver. Cierto es que tiene sus problemas, como cualquier acceso anticipado, pero con el tiempo se solucionarán, sobre todo con el feedback de la comunidad. No hay duda de que, con el tiempo, Towerborne llegará a ser el juego al que aspira, uno que nos ofrezca horas y horas de diversión. Con ganas de ver cómo avanza el desarrollo.

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