Hace relativamente poco tiempo, en el 2022, se estrenaba en PC The Bridge Curse Road to Salvation. Posteriormente, el año pasado, el juego daba el salto a consolas. Pues bien, no han tardado mucho SoftStar en brindarnos una continuación de éste juego de terror y hoy os traemos el análisis de The Bridge Curse 2: The Extrication.
El juego se lanzó el pasado 9 de mayo en PC y, aunque no hay fecha confirmada, saldrá este mismo año 2024 en consolas. Nosotros ya lo hemos podido jugar y, si me acompañáis en estas líneas, trataremos de dilucidar si merece la pena o no esta nueva entrega, así como sus puntos fuertes y los más débiles.
Empiezo aclarando una duda que suele surgir muchas veces cuando hablamos de la continuación de un título anterior. ¿Es necesario jugar a la primera parte? La respuesta es que no. Esta entrega, a pesar de estar ambientada de manera muy similar a su primera parte, nos lleva a otra localización y nos cuenta otra historia. Dicha historia no está ligada a los eventos que tuvieron en el juego de hace 2 años. Por ello, podéis lanzaros sin miedo a esta segunda parte sin haber jugado a la primera.
Análisis The Bridge Curse 2: Una historia quizás ya vista
En lo tocante a la historia, el juego nos traslada a la universidad de Wen Hua, famosa por figurar entre el top 10 de los campus con historias de fantasmas y fenómenos paranormales. Seguiremos las peripecias de 4 personajes en su intento por rodar una película para participar en un festival de cine de terror. Todo ello originado por un evento que tuvo lugar en el edificio Da Ren de la universidad y que las leyendas y el paso del tiempo se han ocupado de hacer más misterioso aún.
Argumentalmente, y sin querer hacer spoilers, el juego nos va poco a poco introduciendo elementos de una historia que acaba siendo algo tópica entre este tipo de ambientación. En ocasiones, y salvando las distancias, me ha recordado a lo visto en películas asiáticas tipo “The Ring” aunque si bien no se juega tanto con lo paranormal y más con un miedo que se intuye.
La estructura del juego es dividir nuestra partida siguiendo a los 4 personajes por separado. Es decir, jugaremos por orden (sin poder alterarlo) las historias de los 4. Obviamente, como estas historias ocurren en el mismo edificio, veremos como los 4 episodios están íntimamente relacionados entre ellos, aunque la partida se desarrollará de manera independiente en cada “sección”.
Una jugabilidad algo escondida…
En lo puramente jugable, estaríamos ante una aventura de terror que no llega a ser un survival horror. En lugar de apostar por una acción a lo Resident Evil, el juego se decanta más por una acción a lo Outlast. La sensación de indefensión será una constante en el juego y tan sólo en algún segmento jugable tendremos una lámpara que nos permitirá “rechazar” el ataque de un ser perseguidor. Será en varias ocasiones y con distintos personajes en las que tendremos que jugar al juego del gato y del ratón, teniendo que huir y escondernos de nuestro perseguidor para poder seguir avanzando.
Además de esta mecánica de sigilo/huida, el juego contará con segmentos en los que nos tocará usar el “coco” y resolver puzles para seguir avanzando. Los habrá más sencillos y consistentes simplemente en buscar un objeto en el escenario y otros más intrincados en los que habrá que pensar bien la clave. También contaremos con puzles clásicos de mover piezas para formar un conjunto.
En definitiva, dos serán las bases jugables del juego de SoftStar: por un lado tendremos la exploración de los escenarios y la resolución de puzles y, por otro, escenas de algo más de tensión y terror en las que nos tocará escondernos o huir de alguna entidad que nos aceche. Como añadido, el juego contará con “coleccionables” o ítems que amplían la historia. Para los completistas, su reto será descubrirlos todos y esto dará para más horas
…entre tanta cinemática
Aunque la base jugable sea muy atractiva, el juego la atropella de manera frontal debido a sus continuos cortes en el ritmo y sus abundantes escenas cinemáticas. En repetidas ocasiones, el juego parará la “acción” y nos “deleitará” con escenas (algunas incluso demasiado largas) en las que asistimos como meros espectadores a lo que se nos cuenta.
No digo por ello que sean malas o que no se sigan con interés, pero sabe mal que el juego te corte el ritmo tantas veces cuando, digamos, te lo estás pasando bien. Eso hace que casi la jugabilidad pase a un segundo plano y en muchas ocasiones dejemos el mando o el ratón para saber que ahora no toca jugar y que hay que esperar a que acabe la cinemática. En mi opinión, quizás tendría mas sentido compactar dichas secuencias al inicio o al final de las historias de los personajes y dejar más libertad jugable al jugador, y no ver interrumpido su ritmo cada dos por tres.
Aún así y con todo, estamos ante un juego cuya jugabilidad, sin ser muy novedosa, está elaborada y es muy directa, sencilla y clara. En casi todo momento sabrás lo que tendrás que hacer y a donde tendrás que ir. Por la parte del menú de objetivos y en parte por la estructura de los escenarios, casi lineales, en los que no tendrás tiempo a penas de perderte ni de desviarte de tu misión.
En lo visual es correcto, ¡y va bien en Steam Deck!
En cuanto a la ambientación, el juego incide en varios puntos en común que tiene con el cine asiático de terror. No faltarán algún jumpscare y una ambientación tenebrosa que roza lo paranormal en ocasiones. Si hablamos del apartado audiovisual, el juego luce de manera correcta y no hemos observado ningún fallo grave. Si bien no es un portento gráfico y alguna textura necesita de más trabajo, cumple de manera correcta y no podemos pedirle más aun título que no tiene vocación de ser el nuevo triple A que cambie la industria.
Además el juego, a pesar de no tener la etiqueta de verificado en la tienda de Valve, es totalmente compatible en Steam Deck de manera nativa. Si bien es cierto que la tasa de frames no alcanzará los 60 cuadros por segundo, es disfrutable rondando entre los 30 y 40 FPS, dependiendo también de si limitas el TDP o no
Análisis The Bridge Curse 2: Conclusiones
A modo de conclusión, las 5 horas que te puede durar The Bridge Curse 2: The Extrication son plenamente disfrutables a poco que te gusten los juegos de terror narrativos en los que no hay mucha acción y se orienta más a la exploración y la resolución de puzles. Hubiéramos deseado mayor ritmo y menos interrupciones con las abundantes cinemáticas, pero gracias a una jugabilidad entretenida y accesible para todos, serán los fans de los juegos de terror y misterio los que disfruten más con esta propuesta.