7 Raven Studios son los encargados de Ghost Sweeper, un plataformas de lo más interesante que plantea un pequeño bombón jugable para los amantes del género. Ocho mundos y dos héroes diferentes conforman un mundo de fantasía en el que tendremos que enfrentar a multitud de enemigos. Fantasmas y muertos vivientes habitan ahora las tierras gobernadas por el señor oscuro, al que nuestro protagonista tendrá que hacer frente. Nos pondremos en la piel de una suerte de «cazafantasmas» que, con un aparato que recuerda al de las películas, acabará con todos y cada uno de sus enemigos. Unas mecánicas sencillas son suficiente para hacer divertido un plataformas de aspecto «cartoon».
Gráficos
Este colorido videojuego basa su apartado visual en un aspecto de dibujos animados. Cada resquicio de su universo es realmente colorido, siendo así muy atractivo a la vista. Esta simpática aventura mantiene su estilo a lo largo de cada uno de sus niveles, con enemigos muy diversos que actúan de distinta forma a la hora de atacarnos. Todos ellos están caracterizados de forma que sean reconocibles al instante, y lo cierto es que, si siempre puede añadirse más, estos cumplen de sobra para enriquecer la aventura.
Cada ítem, cada bloque jugable tiene su propio diseño, lo que da aún más la sensación de unos escenarios vivos y ricos en este aspecto. Por otra parte, encontraremos una interfaz mínima, que muestra una serie de elementos fundamentales en su jugabilidad. Especialmente, destaca el medidor de la esquina superior izquierda, que permite controlar el estado del artilugio con el que nos defendemos. Lo que más chirría, es que las propias plataformas de cada pantalla se encuentran poco integradas con respecto al fondo. Supongo que está hecho a posta, y estos son meramente decorativos, pero no estaría de más que se adaptasen un poco mejor a la ubicación de ciertos elementos, como las puertas o los portales.
Sonido y textos
No puedo decir que la banda sonora de este Ghost Sweeper sea especialmente memorable. Sin embargo, se hace bastante amena, y a diferencia de otras producciones similares, nos acompaña de maravilla a lo largo de la aventura. Más mejorables son los efectos sonoros, aunque comprensible en el contexto del título que nos atañe. Mejorables, sí, pero no empañan en demasía la jugabilidad, que es al fin y al cabo el componente principal del juego.
Este título de plataformas no cuenta con la posibilidad de cambiar el idioma, ya que carece de cualquier otra traducción que no sea el inglés. Afortunadamente, este dato no es del todo negativo, ya que el nivel será mínimo, y los menús no son precisamente abundantes. Las opciones se reducen a activar o no la música, iniciar el tutorial o acceder a los créditos del videojuego. Nada que no pueda manejar cualquier usuario medio.
Jugabilidad
En esta aportación que hace 7 Raven Studios a los plataformas, he encontrado lo que podría ser una buena oportunidad para aquellos menos habituales al género. Y es que su jugabilidad tiene buena parte de culpa. Hay rompecabezas y mecánicas que no dan lugar al aburrimiento, ni tampoco a una repetición que haga monótona la aventura a cada paso. A lo largo de nuestro periplo en busca del señor oscuro, atravesaremos 8 mundos diferentes, otros 2 mundos ocultos, y con 8 niveles en cada uno de ellos.
A lo largo de cada nivel, la dificultad irá aumentando con diferentes enemigos cuyas habilidades también serán únicas. El componente estratégico es fundamental, con una profundidad que al principio puede parecer mínima, pero que iremos explotando poco a poco. Hay varios ítems repartidos por los escenarios, y la forma en la que accedemos a ellos debe ser medida con cierta precaución. Las trampas y los enemigos pueden matarnos de un solo toque, lo que supone un buen indicativo de su dificultad, que logra una experiencia equilibrada, sin saturar al jugador.
Para hacernos el camino más llevadero, nos ayudaremos de un arma con el que nuestro protagonista irá creando bloques de hielo, que podremos romper al mismo tiempo. De esta forma, podemos acceder a las zonas más intrincadas. Su doble uso consiste también en absorver a algunos enemigos, como si de los «cazafantasmas» se tratase. Esto permite arrojar a los enemigos desaciéndonos de ellos . Otro elemento a tener en cuenta, son los portales, los cuales permiten entrar en zonas imposibles para obtener las preciadas llaves con las que abrir las puertas y finalizar los niveles. Resulta sencillo de entender y de jugar, pero requiere un mínimo de habilidad como es lógico.
Duración
Hablamos de un título comedido que emplea cifras comedidas, también en cuanto a duración. Generalmente, los juegos indie como este pretenden crear una aventura más breve pero de forma que sacie lo máximo posible al jugador. 7 Raven Studios lo consigue en parte, aunque el viaje se queda algo corto, pudiendo completarse en poco más de 2 o 3 horas como máximo. Si por otro lado se es más diestro a los mandos, estos números pueden reducirse notablemente, pero como siempre, dependerá de las habilidades de quien lo juega. Tengo la sensación de que muchos usuarios echarán de menos unos cuantos niveles de más, pero al mismo tiempo, es el precio el que justifica claramente este apartado.
Conclusión
Ghost Sweeper es una oportunidad perfecta para esos jugadores que no se han animado del todo a experimentar un plataformas. Una experiencia que no es retante en demasía, pero que exige un mínimo de concentración y habilidad. El juego recompensa el esfuerzo, y su característico apartado visual juega a su favor con multitud de escenarios. Es una pena que se quede tan corto, y he echado de menos más batallas con jefes finales. Si bien los escenarios parecen poco integrados en los fondos, al final el conjunto se ve avalado entre otras cosas por el precio. Por una minúscula inversión, nos aseguraremos un plataformas muy decente con el que amenizar toda una tarde.
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Ghost Sweeper
4,99
Pro.
- Apartado visual
- mecánicas sencillas pero divertidas
- Dificultad equilibrada
- El precio
Contra.
- Una duración muy reducida
- Unos fondos que no encajan muy bien con las plataformas
Acerca del autor
He viajado a mundos que jamás creeríais, acabado con enemigos que escapan a todo misticismo. He sentido mi pulso acelerarse con cada batalla, y el suspiro de quien sabe que tendrá que volver a levantarse. Siempre hay un villano esperando y una aventura a la vuelta de la esquina.
