Aun con la resaca del espectacular Inside que vivimos ayer, toca sacar las primeras conclusiones. Y es que, con toda la información desvelada se nos han podido pasar más de un detalle.
En primer lugar, uno de los detalles más llamativos en el acercamiento de Microsoft a la cultura japonesa. Puesto que, como hemos visto van a comenzar a aparecer sagas hasta ahora inéditas en la consola americana. Hablamos de sagas tan emblemáticas como Yakuza o las primeras entregas de Kingdom Hearts.
Esta decisión tomada por Microsoft ha pillado a todo el mundo desprevenido. Principalmente, teniendo en cuenta que los planes que se rumoreaban desde el gigante norteamericano era la compra de un estudio japonés. En cambio hemos tenido una maniobra maestra que permitirá acercar estos títulos a los jugadores a través del Xbox Game Pass.
El año del Game Pass
Ya lo dijo Phill Spencer, 2020 será el año de Scarlett. Por tanto, este año y concretamente este evento tendría que tener otro protagonista. Sólo podemos decir que vaya si lo ha tenido. El sistema de suscripción de Microsoft, Xbox Game Pass, tanto en su versión estándar como Ultimate ha sido el principal protagonista del evento.
Gracias a los movimientos de Microsoft, podríamos decir que casi resulta inconcebible no contar con una suscripción a su sistema. Es por esto, que la idea de traer todos estos títulos de nicho como es el caso de Yakuza a este servicio, ayudará a que los jugadores accedan a títulos que posiblemente antes no hubiesen probado. Además de esto, la inclusión de la saga Final Fantasy a este servicio, es un reclamo más que mayúsculo para los amantes del J-RPG.
Por todos estos motivos, consideramos que Microsoft y Japón se encuentran más cerca que nunca. Y para lograr esta unión, que mejor que tener como nexo a Xbox Game Pass.
Acerca del autor
Psicólogo amante de los juegos cooperativos, el RPG y de disparar a todo aquello que se mueva.