Directamente desde la forja, nace una nueva IP desarrollada por MercurySteam y editada por 505 Games, Blades of Fire. Este videojuego que se ambienta en un mundo de fantasía único, explora el género de los souls en un primer momento, aunque pronto descubriremos las diferencias que posee y sobre todo, el sello de identidad propio con el que cuenta. Y es que, esta odisea recuerda a otras grandes historias cercanas a la literatura de fantasía con aspectos importantes en cuanto a su jugabilidad, con un gran protagonismo de la forja y la posibilidad de editar el armamento a nuestro antojo.
He jugado a Blades of Fire en una Xbox Series X y también he podido probar la versión de Xbox Series S, ambas con un rendimiento adecuado. Queremos agradecer a MercurySteam el habernos facilitado un código digital que nos ha permitido disfrutar de esta gran experiencia. Vamos allá con el análisis:
Aran de Lira, Adso, la Reina Nerea… una historia de fantasía medieval con su sello de identidad
Vale, reconozco que la premisa de Blades of Fire si sesgamos su identidad al máximo, no es la más original que hayamos visto en el tiempo. Una Reina malvada que se ha adueñado del Reino, nosotros, en la piel de Aran de Lira y acompañados en todo momento del joven Adso, emprendemos un viaje hacia la reconquista del reino. Pero es cierto que una vez que, mediante conversaciones y apuntes que el propio Adso recoge durante nuestro viaje. Profundizaremos más en esta historia con aroma a otras grandes obras literarias como por ejemplo, El Señor de los Anillos.

De esta grandísima obra me ha dado la impresión que recoge la esencia que tuvo su primera parte, La Comunidad del Anillo. No es que formemos una comunidad aquí (sí con Adso), sino esa sensación en la cual debemos hacer un largo viaje. Una aventura sin parangón que nos llevará a un mundo de constante descubrimiento. Explicando un poco más el primer párrafo de este apartado, la Reina Nerea posee la posibilidad de convertir en piedra todo objeto de acero, hierro, etc. Por tanto, el reino ha sucumbido al no poder defenderse adecuadamente. Por nuestra parte, pronto asumimos la responsabilidad de ser uno de los forjadores.
Siete martillos de forja que han desaparecido, nosotros contamos con uno de ellos (en serio no os parece sacado de los cuentos de Tolkien). En cualquier caso esta historia es bien distinta en su fondo y, también, comete un pequeño error en su disposición. Reserva demasiados aspectos del lore para nuestro anuario, aquí sí que explica todo con bastante detalle y con contexto, pero si no pasamos por aquí, podemos perdernos mucha información por el camino. En todo momento podremos conversar con Adso (o enviarlo al campamento), el cual nos explicará distintos detalles de lo que estamos viendo, aunque he sentido que faltan líneas de diálogo para hacer de esto algo totalmente funcional y nutritivo.
Blades of Fire nos propone una sensación constante de aventura y descubrimiento, con un diseño de niveles enrevesado pero muy bien interconectado
Esta aventura nos llevará por distintos reinos, con mapas que casi podremos explorar a nuestro libre albedrío. El título reserva zonas principales en las que transcurrirá el groso de nuestro tiempo aunque siempre recoge pasadizos ocultos o zonas que podremos explorar si nos atrae lo suficiente la propuesta. Es difícil que no lo haga porque en todo momento he tenido esa sensación de descubrimiento que consiguen transmitir las mejores obras. Los mapas cuentan siempre con una conexión en la que mediante su exploración, iremos interconectando entre sí. También, tendremos que prestar atención al entorno, pues no se nos indicará el camino a seguir con exactitud.

Estas zonas más ocultas reservan potenciadores de salud, vigor, que nos permiten aumentar nuestras estadísticas. Esto no es un RPG, aunque cuenta con aspectos que nos hacen pensar que sí, como es la Forja (de la que os hablaremos en el siguiente apartado). Además de estos potenciadores, también podremos descubrir objetos de misión como llaves, nuevos diseños de apariencia para Aran o, sobre todo, nuevas partes de arma que se personifican mediante estatuas. Estas, a su vez, portan aquella del estilo que debemos poseer en ese momento para añadir un nuevo plano a la Forja.
Durante las misiones, tendremos también la capacidad de decidir ciertas acciones, las cuales modifican nuestro devenir en la aventura. No, no es una toma de decisiones de un RPG, pero sí podemos decidir ayudar o no, a según que personaje, lo cual podrá expandir la narrativa mediante líneas de diálogo o nuevos instrumentos. Por el mundo, encontramos personajes con carisma que nos podrán echar una mano. Por ejemplo, en las primeras zonas descubriremos un personaje que nos permite «donar» nuestras armas para obtener recursos, obtendremos un mayor beneficio según la leyenda que forjemos de nuestro armamento en particular.
El combate, una idea que finalmente funciona a la perfección a la vez que genera un reto a batir
Estos Reinos estarán repletos de enemigos. En ellos, encontramos a las fuerzas militares que apoyan a la Reina Nerea, pero también multitud de criaturas que no nos dejarán pasar ni una. Trolls, no muertos, razas originales… cada uno de estos enemigos cuenta con su propio patrón de combate, el cual deberemos aprender si queremos atinar y seguir con vida. A diferencia de otros títulos del género soulslike (si es que Blades of Fire se puede encuadrar aquí), no nos enfrentaremos a tantos jefes finales, sino que brillan más los enemigos mundanos y lo que podríamos denominar como «subjefes».

En cuanto al combate en sí, contamos con cuatro acciones de ataque ajustados a nuestros botones del pad (A,B,Y,X). Cada uno de ellos nos permite atacar desde un ángulo en concreto, esto será vital pues según el enemigo al que nos enfrentemos o arma que portemos (estas, pueden tener dos posiciones en base al daño cortante, punzante, machacante…) distinguiremos sus puntos débiles. Estos se muestran por colores, verde significa que haremos el máximo daño posible, amarillo nos reducirá en un porcentaje y rojo directamente, no le hará ni cosquillas. Por tanto, será de vital importancia atacar cuando sea adecuado, dominar el esquive, bloqueo y parry, controlar nuestra barra de resistencia así como la de bloqueo.
Los combates se sienten muy bien a los mandos. Tendremos tres niveles de dificultad para seleccionar, aunque el juego te incita a elegir el máximo pues su experiencia aquí es la más satisfactoria. No obstante, el nivel intermedio continúa manteniendo un reto a la altura y es quizás más adecuados para aquellas personas que no quieran frustrarse en exceso. Pero claro, todo lo que relaciona a la Forja, el cuidado con las armas, utilizar aquella que mejor nivel tenga para los enemigos más fuertes y demás, se potencia en este último nivel.

La Forja, la gran aportación a nivel jugable
Si algo destaca en Blades of Fire en detrimento de otros videojuegos, es el forjado de nuestras propias armas. Sí, cuenta con la suficiente elaboración como para pertrecharnos a nuestro gusto. Contamos con distintos tipos de armas como por ejemplo espadas, espadones, mazas, dobles armas, lanzas, etc. Dentro de cada uno de estos tipos, existen variaciones que iremos desbloqueando eliminando a X número de enemigos que porten armas similares. Una vez dentro de un tipo de arma en concreto, también podremos cambiarle el filo, la longitud, el agarre… lo cual modificará sus estadísticas así como utilizar distintos componentes de mayor o menor calidad encontrados por el mundo.
Una vez que tengamos todo esto claro, nos pondremos a forjar el arma que hayamos seleccionado mediante un minijuego bastante original. Literalmente la forjaremos con nuestro martillo y a golpes, como si de Forjado a Fuego se tratase. Tendremos que darle la forma adecuada, en pantalla nos aparecerán una serie de barras, con una curva a la que deberemos de aproximarnos. Las armas cuentan con una serie de estrellas, que según hayamos conseguido en este minijuego, nos permitirán repararlas un número determinado de veces. Contamos con artefactos para mejorar el número de estrellas por arma así como también pasa con las pociones de vida y su efecto.

Gráfica y audiovisualmente, Blades of Fire nos continúa sorprendiendo
Blades of Fire utilizar el Mercury Engine, un motor gráfico desarrollado por la propia desarrolladora que muestra resultados más que satisfactorios. El apartado gráfico es muy consistente, el nivel de detalle, vegetación, distancia de dibujado, etc. Por otro lado, a nivel artístico cuenta con una gran personalidad y nos transporta a esa sensación de viaje que os comentaba al inicio de este análisis. Sí es verdad que no cuenta con un gran número de biomas, o al menos, no notamos excesiva variación en el corto tiempo. En cuanto al rendimiento, ambas versiones rinden perfectamente, con un mayor número de fotogramas en Xbox Series X pero también he notado alguna caída de los mismo.
A nivel sonoro, el título nos lleva de la mano con música medieval y fantástica mediante diversos instrumentos, como por ejemplo la flauta. En los momentos de tensión sonará una melodía característica, durante la exploración cuenta con un número más variado. En cuanto a la voces, estas se encuentran localizadas en voces al inglés con subtítulos y textos en español. Claro, siendo un juego español y ya como guinda, me hubiese gustado verlo localizado en voces al español aunque, el nivel es alto y cuenta con pequeños momentos cómicos que suman a su conjunto general.

Conclusión
MercurySteam ha forjado una IP de leyenda con Blades of Fire. Una aventura de fantasía medieval que tiene aroma a grandes obras literarias con una historia única. El diseño de niveles, aunque enrevesado, está totalmente interconectado y nos aporta constantemente una sensación de descubrimiento. El combate es original, exigiéndonos al máximo, así como el sistema de forjado probablemente sirva como precursor para ser imitado en el futuro. Gráficamente es notable y cuenta con un nivel sonoro a la altura. ¿Y, ahora? es tu momento, Aran de Lira, para liberar al Reino del mal mediante tu arma forjada a fuego.
Blades of Fire está disponible para Xbox Series X|S, Playstation 5 y PC. Quédate con nosotros, sin olvidarte de visitar nuestra página web a través del siguiente enlace.
Acerca del autor
Siempre me ha gustado jugar a videojuegos y leer artículos sobre ellos, ¿Por qué no escribir?