Análisis de Deathbound: un soulslike con esencia

Deathbound

En el panorama actual de los soulslike, donde títulos como Elden Ring o, más recientemente, Black Myth: Wukong dominan la escena, Deathbound, desarrollado por el estudio brasileño Trialforge Studio, intenta hacerse un hueco a pesar de no tener el mismo impacto. Aunque a primera vista parece seguir al pie de la letra la fórmula establecida, Deathbound introduce suficientes elementos nuevos para captar la atención.

Uno de los aspectos más distintivos de Deathbound es su ambientación, que mezcla fantasía y ciencia ficción en un mundo postapocalíptico llamado Ziêminal. Aquí, exploramos Akratya, una ciudad en ruinas que oscila entre paisajes medievales y entornos futuristas. Además, la interacción entre las diferentes facciones del lugar es muy interesante. Por un lado, está la Iglesia de la Muerte, que la anhela y la considera una bendición. Por otro lado, está el Culto de la Vida, con sus costumbres más o menos éticas. Juntas, crean una sinergia que es bastante interesante y que anima a querer saber más sobre la historia y el lugar.

El combate y la progresión en Deathbound

Deathbound también destaca por su combate, que nos permite canalizar las habilidades de guerreros caídos a través de un sistema de cambio entre cuatro esencias. Literalmente cambiamos de cuerpo a voluntad. Esta dinámica añade un nivel de complejidad al combate que no esperaba, pero que he agradecido mucho. Podemos alternar entre las esencias en el momento adecuado para ejecutar ataques y defensas especiales. Sin embargo, la gestión de la salud y la resistencia compartida entre las esencias supone un reto adicional, que nos obliga a hacer una mejor gestión de nuestros objetos. Por otro lado, también tenemos la posibilidad de recuperar la vida de las esencias inactivas mediante el combate. Un punto muy importante de las esencias es que, además de tener habilidades y estadísticas diferentes, también tienen personalidades. Algunas pueden ser más o menos afines entre sí. Si colocamos una esencia que se lleve mal con otra, generarán un efecto negativo, además de uno positivo. Si, por el contrario, las dos se llevan bien, sólo será un efecto positivo, por lo que tenemos que jugar con los huecos que tenemos para equiparlas.

El combate en Deathbound es un poco más lento y táctico en comparación con otros del género, y entiendo que pueda resultar frustrante para algunos, sobre todo al principio. Puede que, en el pasado, los soulslike se caracterizaran por tener un combate torpe, pero hoy en día no es algo esperable. Sí que es cierto que poco a poco se hace más ágil con las habilidades, pero esa torpeza se nota. Por otro lado, los enemigos son vistosos y los jefes muy divertidos.

En cuanto a la progresión, Deathbound introduce un árbol de habilidades compartido entre las esencias, lo que nos permite mejorarlas de manera gradual. No obstante, la personalización puede sentirse limitada para aquellos que prefieren un desarrollo de personajes más profundo.

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Un apartado técnico sólido

Deathbound está desarrollado con Unreal Engine y, aunque no alcanza el nivel de detalle de títulos AAA, no lo necesita. Su estilo artístico y el diseño de personajes consiguen crear una atmósfera envolvente, que transmite su propia personalidad. Las distintas áreas del juego están bien diferenciadas, aunque algunas sufren de una repetición en su arquitectura, sobre todo en los pasillos, lo que puede confundir a veces. Por otro lado, el sonido es uno de los puntos fuertes del juego, con diálogos que ayudan a sumergirnos en la historia y a dotar a cada esencia de una personalidad muy marcada, algo de agradecer.

Las opciones de PC no están nada mal, podemos ajustar la resolución, limitar los FPS, el desenfoque de movimiento o la calidad de las texturas y las sombras entre otras cosas. También es compatible con DLSS y FSR, por lo que podemos ganar unos frames por segundo extra, aunque el juego se mueve sin problemas, al menos en mi experiencia, bastante fluida y sin errores.

En definitiva, Deathbound es…

En resumen, Deathbound no redefine el género, pero ofrece unas 10 horas muy disfrutables para los fans de los soulslike que buscan algo diferente. Aunque tiene un combate algo torpe, sus innovaciones en la ambientación y el sistema de esencias lo hacen destacar en un mercado saturado. Su precio accesible y la promesa de contenido adicional post-lanzamiento lo convierten en una opción interesante para quienes buscan un reto nuevo entre los lanzamientos más importantes.

Deathbound está disponible para Xbox Series X|S, PS5 y PC. Quedaos con nosotros en Area Xbox para leer toda la actualidad de vuestros videojuegos favoritos en vuestra plataforma favorita.

Deathbound

7.5

Nota

7.5/10

Pro.

  • Las esencias
  • La ambientación

Contra.

  • Combate algo torpe

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