Insurgency: Sandstorm, es uno de esos juegos en los que la simulación toma el mando y te lleva a vivir una experiencia única. Ambientado en un conflicto armado entre dos facciones ficticias, viviremos la guerra moderna con todo lujo de detalles. Y es que, si algo caracteriza a este lanzamiento es el realismo. Un mimo por el detalle que hace que estemos ante un juego que destinado a los jugadores más exigentes, donde la táctica y el trabajo en equipo serán necesarios para alcanzar la victoria.
Ahora, tres años después de su lanzamiento en PC nos llega la adaptación a consolas de Insurgency: Sandstorm. El título desarrollado por New World Interactive, llega a nuestras consolas de la mano de Koch Media. Un título que busca hacerse hueco dentro del género FPS gracias a una apuesta arriesgada, pero que en PC logró funcionar y atraer a un gran número de jugadores. Pero, ¿Cómo se siente en consolas?
Un apartado técnico que cumple
En primer lugar, en lo primero que nos fijamos cuando nos ponemos a los mandos de un nuevo título es en su apartado gráfico. En esta ocasión, hemos podido disfrutar de su versión para Xbox One, la cual cuenta con algunas mejoras para Series X, como son su resolución a 4K y sus 60 FPS. Cabe destacar que hemos encontrado un rendimiento bastante sólido, sin ningún problema de FPS ni nada similar. No obstante, hay que tener en cuenta que no estamos ante el juego más puntero del momento.
Como ya hemos adelantado, estamos disfrutando de un título que ya tiene tres años, por lo que cuenta con alguna que otra carencia. Pero, no te asustes, el juego cumple más que de sobra y nos ofrece unos escenarios llenos de detalles y un más que buen diseño de armas. Las cuales cuentan con muchos detalles. Donde más notarás las flaquezas de este título será en lo referente al contenido más espectacular (explosiones y demás efectos). En todo lo demás el juego no tiene ningún problema en desenvolverse. Además, estamos ante un lanzamiento que incluye efectos gore, como son los desmembramientos de los enemigos o los nuestros propios.
Por otro lado, su apartado sonoro sigue esta misma línea. Aunque si soy sincero, creo que el trabajo realizado con el sonido de las armas y el de los pasos de los enemigos es muy bueno. Podemos localizar a los enemigos fácilmente gracias al sonido de sus pisadas, aunque si van agachados nos costará mucho más situarles. Otro punto interesante y que me ha gustado mucho es su sistema de radio. Si estamos en el canal del juego, podremos hablar con los compañeros cercanos y también escuchar al enemigo. Un punto muy interesante que hace que tengas que estar siempre atento. A pesar de este buen hacer, he encontrado algún que otro bug, sobre todo al utilizar miras telescópicas, donde muchas veces se pierde el sonido de nuestros disparos y hace que pierdas el hilo de lo que está ocurriendo a tu alrededor.
Jugando con cabeza
Dejando a un lado el apartado técnico, tenemos que hablar de la jugabilidad de Insurgency: Sandstorm, posiblemente el apartado más brillante del juego. Como ya te adelanté, estamos ante un juego que hace que la simulación sea su base. Esto quiere decir que ya puedes ir olvidándote de eliminar a un enemigo disparando sin parar a más de 50 metros. El retroceso de las armas está muy presente y como reza el mismo juego; Los aficionados disparan mucho y rezan, los expertos realizan ráfagas controladas. Con esta premisa te puedes hacer una idea de que estamos ante una obra que se sale de estándares como los que vemos en otras franquicias.
Antes de entrar en las diferentes modalidades y opciones de juego quiero detenerme en este punto. Insurgency: Sandstorm es un juego que sabe hacer muy bien su trabajo. Y es que, aquí podremos eliminar a un enemigo con un único disparo prácticamente con cualquier arma, siempre que seamos precisos. Pero claro, esto significa que nosotros también caeremos igual de rápido. Es por ello que ir corriendo por el medio del mapa siempre acabará con el mismo resultado; muertos y esperando el respawn, el cual te adelanto que es limitado.
En definitiva, no es un juego que se pueda recomendar a cualquiera, ya que aquí la diversión reside en saber moverse por el mapa, tomar posición y disparar de forma controlada y precisa. También os puedo decir que el juego premia mucho la habilidad del jugador. Ya que podremos sobrevivir a varios disparos a las extremidades pero no a más de uno en la cabeza en la mayoría de los casos. Por lo que si cuentas con una buena puntería ganarás muchos de tus enfrentamientos.
Puramente multijugador
Otro punto a tener en cuenta es que cuando hablamos de Insurgency: Sandstorm, hablamos de un título que únicamente está orientado al multijugador. Eso sí, además de su versión PvP, contamos con misiones cooperativas contra la IA. Una buena opción para jugar con amigos y hacernos con las mecánicas del juego. Estas misiones están bien y como ya digo, y nos harán sentir que el trabajo en equipo es más que necesario. Sin embargo, lo que verdaderamente destaca en este juego es su modalidad competitiva.
Ya entrando en detalles con respecto a esta funcionalidad, encontramos varias opciones con las que poner a prueba nuestras habilidades. El primer modo es push, donde los equipos se dividen en defensores y atacantes. Es un modo muy interesante y es posiblemente la versión más rápida de sus opciones jugables, contando con partidas de 10-15 minutos, aunque más bien tirando a los 15. Por otro lado, tenemos un Firefight, un modo donde tendremos que luchar una serie de objetivos y capturarlos antes que el enemigo (personalmente es el modo que más me ha gustado). También contamos con el clásico Dominación y finalmente Frontline, donde tendremos que destruir la base enemigo y abarca combates a mayor escala.
Equípate para la guerra
Dejando esto a un lado, antes de jugar nuestra primera partida podemos personalizar nuestro personaje. Las opciones son bastante limitadas y aquí es donde menos destaca el juego. Hecho esto, tan sólo que tenemos que buscar partida y en cuestión de segundos estaremos en el campo de batalla. Durante las partidas, tendremos que elegir entre diferentes clases, cada una contando con su propio equipamiento.
Eso sí, tendremos a nuestra disposición un gran número de accesorios y una más que decente recopilación de armas. Podremos seleccionar lo que queramos, eso sí, siempre teniendo en cuesta que tanto estas mejoras como las armas cuestan puntos de suministros, los cuales son los mismos para todos los jugadores y en todas las partidas. Atendiendo a ellos tendremos que optimizar nuestro equipo para obtener el mejor resultado en combate.
En definitiva, Insurgency: Sandstorm es un juego muy exigente y que no está hecho para todos los jugadores. Contando con un apartado técnico correcto, pero que no cuenta con grandes alardes. Sin embargo, cuando te pones a los mandos te dejas inundar por una ambientación única, donde cada bala cuenta y donde cada movimiento erróneo se castiga. Si te apetece vivir una experiencia de alta simulación, sin duda no te puedes perder Insurgency: Sandstorm.
Si te ha gustado este análisis te recordamos que tenemos muchos más justo aquí.
Acerca del autor
Psicólogo amante de los juegos cooperativos, el RPG y de disparar a todo aquello que se mueva.