Tokyo Warfare Turbo, es uno de esos títulos que quieren que vuelvas a la infancia. Una época en la que la gran mayoría de los títulos estaban orientados a las recreativas, es decir necesitaban estar listos para jugar desde el segundo 0.
Y este es el principal propósito de la creación de Pablo Vidaurre. Y es que, desde que tomamos el mando por primera vez, sentimos como esta idea está presente.
Antes de comenzar el análisis, recordamos a los lectores que este título está producido por una única persona, Pablo Vidaurre. En esta web tuvimos el placer de realizarle una entrevista recientemente, por lo que si deseas saber más sobre el proceso de creación del juego ahí tenéis aun más información, os dejamos el link aquí abajo. Sin más damos paso al análisis.
Gráficos
En primer lugar, estamos ante un título diseñado por Unity y que viene claramente de un port de PC. Estos detalles debemos tenerlos en cuenta debido a que desde un primer momento tenemos bastantes opciones gráficas.
En primer lugar, el juego luce realmente bien para tratarse de una producción independiente. No sólo contando con gráficos en 4K sino también contando con un pequeño acercamiento al ray tracing. Obviamente esto último funcionando a una resolución mucho menor (900p).
Dicho esto, debemos destacar la opción gráfica anime. Tras probar ambas versiones HD o Anime, sentimos que la verdadera personalidad de este juego se encuentra en sus efectos visuales que nos recuerdan al universo de animación japonés.
A pesar de todo esto, cuando el caos se acumula en pantalla podemos comenzar a notar algunos bajones de fps que si pueden entorpecer la experiencia jugable. Estos bajones suelen ser más comunes con la opción HD activada. De resto, consideramos que el juego tiene un buen rendimiento en Xbox One X.
Sonido y Textos
En cuanto a los textos, como era de esperar están en completo español, tanto los de los menús como los que aparecen en el juego. En lo referente al sonido, por un lado las voces no están en español, pero es por una cuestión de diseño. Las voces se encuentran dobladas a los diferentes bandos que podemos elegir, es decir si seleccionamos un tanque japonés podremos escuchar las voces de nuestra tripulación en este idioma. Debido a que se siente como una decisión de diseño y que aporta en la experiencia jugable, no podemos echarle en cara la falta de voces en español.
Por otro lado, en lo referente a los efectos sonoros, destacamos su buena calidad. Tanto la música que nos acompaña en la partida como el sonido de nuestro tanque están muy bien logrados.
Jugabilidad
En cuanto al aspecto jugable, sigue la línea de lo expresado al comienzo del análisis. De esta forma, estamos ante una jugabilidad bastante simple que tan solo quieres que saltes al campo de batalla con tu tanque e intentes acabar con todos los enemigos que puedas. Para enriquecer a esta experiencia el juego cuenta con diferentes power ups que se pueden recoger al eliminar a los enemigos.
Otro dato remarcable, es que la jugabilidad cambia bastante según el tipo de tanque que utilicemos. Los tanques más ligeros serán más endebles pero mucho más ágiles, mientras que los más grandes se sentirán pesados pero con un poder de destrucción increíble.
A parte de esto, contaremos con una buena variedad de escenarios, que cambiarán de forma drástica el desarrollo de los combates. Pasando de una pequeña ciudad a un extenso desierto.
A pesar de la simpleza de su jugabilidad, encontramos una gran pega que lastra nuestra experiencia. Y es que aunque sepamos que se trata de un título independiente y que es un port de PC, existen grandes problemas de control. El tanque en bastantes ocasiones no termina de responder del todo al control, siendo muy difícil maniobrar con él.
Aun así, el mayor problema viene en los menús. Claramente no están adaptados para el pad de Xbox, de esta forma es prácticamente imposible moverse por ellos con comodidad o simplemente sin cambiar apartados que no queríamos tocar. Además de esto, puede que poder modificar las opciones gráficas a su antojo sea un plus para algunos jugadores, pero creemos que desentona con la idea jugable de sentarte y comenzar a disparar. Posiblemente, hubiese sido más sencillo crear modalidades gráficas como hacen otros títulos, por ejemplo un modo resolución y otro fps.
Duración
La duración del juego en este caso es bastante subjetiva, ya que si nos gusta su propuesta jugable siempre lo tendremos disponible para echar unas partidas. En lo referente al contenido, el juego cuenta con una buena cantidad de tanques que iremos desbloqueando mientras subimos de rango.
Además, contamos con tres modalidades de juego, duelo por equipos, un todos contra todos y un modo supervivencia. Llegar al máximo rango nos llevará un buen par de horas, por lo que dentro de su premisa jugable cuenta con una duración más que aceptable.
Conclusiones
En resumen, Tokyo Warfare Turbo es una obra con un objetivo claramente definido; ser un arcade de la vieja escuela. Para ello utiliza una jugabilidad simple y directa, que hace que el jugador no tenga que pararse a pensar en ningún momento. Lamentablemente, su adaptación a consolas sí hace que el jugador tenga que pararse a pensar, y es que, resulta muy difícil manejarse por unos menús que están claramente pensados para teclado y ratón. Algo que podemos ver en los controles del juego, donde aparece de base los controles para este periférico en vez de para el pad. Aun así, debido a su aspecto gráfico notable para ser un indie, así como su buen aspecto sonoro, consideramos que Tokyo Warfare Turbo es un gran título para los amantes de los tanques y el arcade.
Acerca del autor
Psicólogo amante de los juegos cooperativos, el RPG y de disparar a todo aquello que se mueva.