Análisis de Silent Hill 2: Remake

Silent Hill 2 Remake

Tras un año de exclusividad, llega a consolas Xbox Series, Silent Hill 2: Remake. Esta nueva reimaginación, sobre todo gráfica, que posiciona la cámara detrás del hombro realizada por Bloober Team, actualiza y muestra esta obra a nuevos jugadores más de 20 años después. Tras haberlo completado en las máquinas de Microsoft, está claro que este gran título y quizás, el mejor de esta extensa saga, llega para hacerse hueco en nuestras bibliotecas. A estas alturas sabemos que merece la pena este remake, por tanto focalizaremos los puntos más fuertes y algún aspecto en el que pudiese mejorar de cara a próximas entregas en el siguiente análisis.

Pero antes de nada, queremos agradecer a Konami España el habernos facilitado un código digital que nos ha permitido disfrutar de esta experiencia de terror. He jugado a Silent Hill 2: Remake principalmente en una Xbox Series X, tanto en el modo rendimiento como en calidad. También he podido probar la versión de Xbox Series S. El título cuenta con la función Xbox Play Anywhere, lo que nos permite además jugar a su versión en PC. Sin mayor dilación, vamos a adentrarnos en la niebla.

Todo comienza como lo haría una película de terror, aunque en esta ocasión es todavía más terrorífico lo que nos depara esta aventura

Está claro que al iniciar nuestra aventura y, sabiendo todo lo que nos depara, querríamos dejar el pueblo de Silent Hill atrás y volver a montarnos en nuestro vehículo. Pero se acabaría el juego, ¿no? Además, tampoco sabríamos que le sucedería a nuestra esposa, la cual debemos encontrar tras haberse comunicado con nosotros a través de una carta. En Silent Hill 2: Remake tenemos que encontrar respuestas. Ya desde el primer momento, todo parece algo fuera de lo común, pues una extensa nieblas se propaga por todos sitios hasta que al fin, tras una caminata, llegamos al principio del poblado.

Todo transcurre de una manera orgánica, se nota que el ritmo de juego sigue patrones de antaño. Dependiendo lo bien o mal acostumbrados que estemos a las nuevas tendencias, esto puede jugar a nuestro favor o en contra. En mi caso, valoro más las historias que se cuentan con un ritmo más pausado, con detalles y pequeñas pinceladas que al unirlas en nuestra cabeza, cobran un sentido en su conjunto. Silent Hill 2: Remake pretende eso, contar una historia bien formada, sin excesivas conversaciones ni tampoco notas, pero que estas cuenten con un gran significado cuando se producen.

Como comentaba, no habrá demasiadas conversaciones porque tampoco hay excesivos personajes para mantenerlas. Pero, el impacto que estos tienen en pantalla una vez aparecen, hace que nos sobrecojamos de tal manera y entendamos que; a buen entendedor, pocas palabras bastan. Todos estamos en Silent Hill por un algún motivo, en busca de respuestas, eso se impregna también en estos personajes sin perder en ningún momento el halo de misterio que les rodea. Por ello, la historia poco a poco se va compactando, transformándose en aquello que busca ser desde el primer momento.

Silent Hill 2: Remake consigue transmitir el terror psicológico del videojuego original, sobre todo, mediante la oscuridad

Sabemos que la niebla en Silent Hill 2: Remake es un elemento característico. Porque tras esta fuerte niebla se puede esconder detrás cualquier cosa que nos podamos imaginar. Pero no sólo la niebla juega un papel relevante a la hora de marcar la ambientación de las localizaciones, sino lo que, para mí es más significativo, es la oscuridad. ¿Por qué? Es sencillo. No importa el número de obras que hayamos jugado con anterioridad, pues la oscuridad es un recurso infalible. Me explico, esta genera incertidumbre constante, pues nunca podremos adivinar que va a ocurrir ya que estamos absolutamente desinformados de lo que existe alrededor.

En un momento determinada del título, hacia el principio, desbloquearemos una de las herramientas que estarán a nuestra disposición, la linterna. Creedme cuando os digo que una vez en nuestras manos, contadas son las veces que decidí pulsar el botón para apagarla. A partir de ese momento esta obra se vuelve todavía más oscura, con escenarios que harían palidecer al más valiente guerrero. Sobre estos escenarios, destacan todos, sencillamente. Con un gran diseño, todo lo que se nos pueda ocurrir que nos transmita terror, está ahí, una cácel, un hospital…

Es cierto que estamos equipados con nuestro amago de tabla con pinchos, posterior tubería y también con armas de fuego. Pero, hay elementos que no pueden ser dañados con nuestras armas. Es por ello que la sensación de poder que suele ser potenciada con cada desbloqueo de arma más capaz, aquí es más plana. Esto es realmente bueno, porque el enemigo que realmente no podremos abatir es esa sensación constante de que, en cualquier momento algo malo puede ocurrir. Nuestra radio retransmite señales una vez estemos cerca de algún enemigo, lo que incrementa esta tensión notablemente.

Un diseño de niveles que puede notar el paso de los años, pero que funciona a la perfección

Los niveles comprenden localizaciones ya emblemáticas dentro de la saga. La obra original salió a principios de siglo, ello puede limitar su capacidad de escenarios. Aunque aquí se las han visto para transformar un diseño que parece único y que nos lleva por diversas zonas del mapa que están interconectadas entre sí. El pueblo de Silent Hill, en su parte principal sirve como nexo de conexión entre todas estas zonas. Podremos entrar en diversos establecimientos, resolver los secretos que en ellos se esconden. Además de pertrecharnos de mejor manera, por supuesto.

Aunque donde brilla es en esas localizaciones icónicas comentadas. Tanto los apartamentos, el hospital brookhaven, la cárcel de Toluca… cuentan con un diseño medido al milímetro. Con zonas bloqueadas por llaves, puzles, que nos llevarán a investigar el resto del escenario disponible. Esta obra cuenta con varios niveles de dificultad, permitiéndonos ajustar dos variables, tanto el nivel de los combates como los puzles. Esto podrá cambiar nuestra experiencia de juego, recomendando los primeros dos niveles si es la primera vez que nos aventuramos en Silent Hill, y el tercer nivel si queremos vivir una experiencia de lo más intensa.

Tanto al enemigo que no podemos ver, como al que sí, siempre podremos portar un arma para sentirnos algo más seguros. El registro de enemigos no es demasiado elevado, en donde lucen de la mejor manera las famosas enfermeras. Estos enemigos no son excesivamente peligrosos sino cuando se agolpan varios. También hay jefes finales, que poseen un diseño bastante peculiar y atterrador pero que a la hora de la verdad no nos generarán demasiados problemas. De todas formas, tendremos que aprender a controlar bien el botón de esquive, saber cuando atacar cuerpo a cuerpo o a utilizar las armas de fuego en el momento preciso para no desperdiciar munición.

Audiovisualmente, Silent Hill 2: Remake está cuidado en todos los aspectos

De lo que más se ha beneficiado este remake es sin duda de su apartado gráfico. Más de 20 años son muchos para un videojuego en el que también se ha cambiado el concepto de cámara. Esto lleva a rediseñar escenarios, potenciar los ya creados y transformar una ambientación terrorífica en algo más. El juego de luces cálidas, frías, la dimensión de su oscuridad, el diseño de sus enemigos, escenarios, nivel de detalle; es realmente verosímil y está cuidado al máximo detalle. El rendimiento en Xbox Series X y S es el que debiera ser, notando alguna caída de FPS en escenarios más abiertos en el modo rendimiento de Xbox Series X. Aunque en términos generales, es una obra muy impecable en lo visual.

El audio también da un paso más allá. Si el juego te advierte de que es mejor jugarlo con cascos, es porque ya de por sí se ha hecho un trabajo extra en este apartado. Es verdad, también si cuentas con un buen equipo sonoro se aprecian esos pequeños detalles que hacen que nos mantengamos en una tensión constante. Silent Hill 2: Remake se encuentra localizado en voces a inglés, con un gran nivel de los actores de doblaje. Mientras en textos y subtítulos contamos con una traducción al español muy correcta.

Conclusión

Silent Hill 2: Remake juega contigo en todo momento, por tanto no permitas que la niebla nuble tu juicio. Este remake que reimagina el clásico lanzado hace más de 20 años, con un apartado audivisual renovado que luce como nunca, sigue transmitiendo esa sensación de incertidumbre y terror constante. Ahora, con elementos más actuales como una cámara detrás del hombro, escenarios más abiertos o un sistema de combate actualizado. Su historia nos atrapa desde el primer momento con un terror psicológico que sigue del todo presente, utilizando elementos como la niebla, oscuridad, música, ambientación, enemigos… En defintiva, es el momento de encontrar respuestas y adentrarnos en la experiencia Silent Hill en su máximo exponente.

Silent Hill 2: Remake está disponible para Xbox Series X|S, PS5 y PC. Descubre todas las novedades relacionadas con la industria del videojuego en Area Xbox. Noticias, análisis, artículos, lanzamientos y mucho más, siempre disponibles para ti a través del siguiente enlace.

Silent Hill 2: Remake

9

Nota

9.0/10

Pro.

  • Obra de culto renovada a los estándares actuales
  • Audiovisualmente, potencia la ambientación
  • Historia sobrecogedora, con esos pequeños detalles
  • La niebla, la oscuridad

Contra.

  • No excesiva diversidad de enemigos y jefes finales planos en patrones
  • Buen diseño de niveles aunque nota el paso de los años

Acerca del autor

Siempre me ha gustado jugar a videojuegos y leer artículos sobre ellos, ¿Por qué no escribir?

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